El incendio Thomas, que arde desde hace 11 días en los condados de Ventura y Santa Bárbara, ha devorado unas 100.000 hectáreas de arbustos y árboles y quemado más de 1.000 instalaciones, incluyendo más de 750 casas.
Otras 18.000 instalaciones siguen en peligro, incluyendo mansiones en el rico enclave de Montecito.
El siniestro está contenido en 35%, pese a los esfuerzos de unos 8.000 bomberos, 32 helicópteros y 78 motoniveladoras.
En Santa Bárbara ha llovido muy poco desde el 1 de octubre y hasta la fecha se ha acumulado 7,6 centímetros menos de lo usual.
Otro enfoque de los bomberos era en el flanco oriental, en cañones donde el jueves murió un bombero estatal, cerca del pueblo agrícola de Fillmore. Funcionarios no han dado detalles sobre la muerte de Cory Iverson, de 32 años.
El Servicio Nacional de Meteorología pronosticó peligro extremo por incendio o condiciones "alerta roja" hasta al menos el sábado por la noche, con ráfagas de 64 kilómetros por hora en las montañas del condado de Santa Bárbara, donde arde el siniestro.
El costo de los combates de incendios se está acercando a los 89 millones.