Francia y Uruguay no se sacaron ventajas en el debut y empataron sin abrir el marcador en un partido del Grupo A del Mundial de Sudáfrica que se jugó en Ciudad del Cabo, con arbitraje del japonés Yuichi Nishimura.
En el partido fue expulsado, Lodeiro de Uruguay por doble amarilla. El primer tiempo los mostró a ambos conservadores e imprecisos, jugando la mayor parte en el sector medio y con escasas llegadas a las áreas.
Uruguay marcaba con tres en el fondo y superpoblaba el sector de gestación, Francia defendía con cuatro, pero sus arietes, Anelka, Ribery y Gouvou, se alternaban para encabezar la ofensiva, por lo que también contribuían a la explosión demográfica de las zonas cercanas al círculo central.