Desahogo. Eso es lo que vivió el Cruzado cuando el sanjuanino Daniel González pitó el final del partido. Porque no le sobró nada para vencer a Centenario de Neuquén cosechando el primer triunfo del torneo.
Además, el equipo de Carlos Sperdutti venía de dos empates consecutivos y necesitaba cambiar la racha en su propia cancha, volver a sumar de a tres para retomar la confianza que había perdido en el arranque.
Si algo quedó en claro en la tarde maipucina fue la victoria por sobre todas las cosas, ya que el elenco volvió a estar lejos del nivel futbolístico que desea su entrenador.
Terminó ajustado ante un rival que finalizó con hombres de menos y con innumerables limitaciones futbolísticas. El Rojo salió como una tromba y se llevó por encima a la visita. Benítez desbordaba por derecha y arriba los puntas estaban afilados esperando alguna chance. Y llegó, Fue para Lucas Martínez, quien convirtió el único gol del partido.
