En un giro inesperado de la causa, la Sala II de la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de La Plata, intimó al juez Enrique Gorostegui, en cuyo juzgado se tramita la quiebra de Racing Club, a que disponga el cese de todas las actividades de la acuciada institución de Avellaneda..
El escrito considera que lo actuado el pasado 13 de diciembre está viciado de nulidad. Allí, se autorizaba al club la posibilidad de continuar con las puertas abiertas, con su primer equipo de fútbol compitiendo en el Clausura, así como la concreción de operaciones comerciales como la contratación y la transferencia de futbolistas entre la que se destaca la de Marcelo Delgado a Boca Juniors y las compras de Carlos Cordone y Simionatto.