Marcas de pintura y la chapa patente que quedó en el lugar del accidente complican al conductor del Volkswagen Golf detenido por su supuesta participación en el despiste de ruta que provocó la muerte de la hija del periodista Miguel ‘Tití’ Fernández en Brasil. El detenido, identificado por la policía como Marcos Vinicius da Silva, de 21 años, permanecía demorado en una sede policial de Belo Horizonte por supuesto homicidio culposo y presunto abandono de persona, y podría ser condenado hasta a siete años de cárcel.
El delegado policial de Medio Oeste, Douglas Camarano, sostuvo que tanto el conductor como su acompañante y quien sería el dueño del auto Volkswagen Gol, Rafael Costa Campos, de 23 años, afirmaron que “solo vieron el derrape del auto” y que “si hubieran golpeado a 120 kilómetros por hora el auto estaría destruido, lo cual no es así”. Sin embargo, las pruebas complican a Da Silva habida cuenta de que, según dijo Camarano y publicó el diario Estado de Minas en su versión online, los peritos encontraron pintura gris en el frente del Golf, que es el color del Fiat Doblo en el que viajaba la fallecida María Soledad Fernández (26) y dos productores de la empresa Torneos y Competencias que resultaron heridos.
También el policía sostuvo que la placa frontal del Golf (de San Pablo) se encontró en el lugar del accidente, lo cual consideró una pista más. Además, la causa contempla expresamente el hecho de que los accidentados no fueron auxiliados y los responsables del accidente huyeron del lugar.