Un debut que invita a soñar

A pesar de la derrota ante el último campeón, Los Pumas jugaron un gran partido ante Nueva Zelanda.

Un debut que invita a soñar

El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas, cayó ante los All Blacks por 26-16 (4-0) en su debut en la octava Copa del Mundo de rugby, dejando una muy buena impresión ante un rival que no jugó el partido perfecto, simplemente porque los albicelestes se lo impidieron con una gran defensa.

Tras un inicio complicado, en el que cometieron muchas infracciones, los conducidos por Daniel Hourcade brillaron en la segunda mitad del primer tiempo del que se fueron en ventaja por 13-12, marcando el único try de la etapa a través de Guido Petti.

Pero en la parte complementaria, los neocelandeses monopolizaron la pelota y fueron una y otra vez sobre el ingoal albiceleste hasta que lograron quebrarlo en dos ocasiones, a través de Aaron Smith y Cane, para arrancar la defensa del título con un triunfo justo.

Fue un primer tiempo notable el de Los Pumas, que lograron superar las contingencias que sufrieron en los primeros 20 minutos y se fueron al descanso en ventaja por 13-12, marcando el único try del segmento. Nueva Zelanda manejó la pelota en esos minutos iniciales en los que al equipo argentino le costó mucho frenar a su rival. Lo hizo a través de penales (ocho en ese lapso) y permitió a los All Blacks ponerse al frente 9-0 con tres patadas de Dan Carter, dos de ellas cuando Argentina estaba con 14 por la amarilla recibida por Pablo Matera.

Pero de a poco las cosas comenzaron a cambiar. Volvió el ala surgido en Alumni y la defensa se hizo más sólida. Y enseguida, tras una gran acción de los forwards, llegó el try de Guido Petti -dejó la cancha conmocionado y fue remplazado por Galarza, de gran trabajo- que trajo tranquilidad.

Una zancadilla de  McCaw lo dejó 10 minutos afuera y permitió que Nico Sánchez pusiera a Los Pumas por primera vez al frente. Otra burda infracción de Conrad Smith a Juan Imhoff dejó al centro afuera por igual lapso, mientras Sánchez hacía delirar al estadio y ponía el marcador 13-9.

En esa parte complementaria, Los Pumas casi no tuvieron la pelota. Y ante un adversario que tiene un control notable poco se pudo hacer. Si bien Sánchez estiró distancias en el inicio, cuando Conrad Smith aún estaba afuera con amarilla, el resto fue todo "negro".

Los Pumas se fueron agotando y aunque nunca dejaron de tacklear, les costó recuperar la pelota y asumir la iniciativa. Y con los cambios siguieron ganando los neocelandeses que, de a poco, fueron inclinando el juego a campo albiceleste. Los tries tardaron en llegar pero llegaron. Los Pumas no pudieron pero dejaron una gran imagen.

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