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hace 1 hora
El cuerpo de un niño de dos años al que le faltaban sus órganos y dientes, y tenía manos y pies mutilados, fue hallado hoy a la vera de una ruta de la ciudad bonaerense de Miramar, por lo cual la justicia investiga el crimen e intenta identificar a la víctima, ante la presunción de que su familia puede estar implicada en el caso.
El cadáver fue encontrado esta madrugada por un hombre que circulaba en bicicleta por el tramo final de la ruta 11 que conduce a Mar del Sud, cerca del arroyo La Totora, donde vio que un perro arrastraba algo y lo mordisqueaba, por lo cual al acercarse se dio cuenta de que se trataba de un niño y avisó a la policía.
La fiscal marplatense Ana María Caro advirtió que en principio se trataría de "un homicidio" y remarcó, tras analizar in situ el hallazgo junto a la policía científica, que "es terrible el estado en que se encontró el cuerpo".
La funcionaria judicial ordenó una autopsia urgente del cadáver que, según fuentes de la investigación, determinó en forma preliminar que se trataba de una persona dos años, aunque no se pudo ratificar su género ni su identidad porque con los cortes en manos y pies le habían borrado las huellas dactilares.
Además, las fuentes consultadas señalaron que los órganos internos y sexuales del niño fueron extraídos y tenía heridas con costuras realizadas "con hilo médico", como si se tratara de "una autopsia", por lo cual los investigadores sospechaban que pudo haber intervenido un profesional.
En ese sentido, apuntaron que los cortes fueron realizados "con precisión" con un elemento liso muy cortante sobre las articulaciones de las manos y los pies, y destacaron que sus dientes fueron arrancados, lo que indicaría una intención de que no se pueda establecer la causal de la muerte y la identidad.
Un perito odontólogo determinó que las muelas recién estaban apareciendo, situación que ocurre entre los 24 y los 30 meses de vida, con lo que se pudo determinar la edad.
Las fuentes señalaron que tenía la arteria aorta cortada con precisión por una tijera y que la falta de órganos era notoria dado que, dijeron, "estaba totalmente hueco y se podía ver la columna".
La fiscal manifestó que a los niños "al nacer se los identifica con el piecito y el pulgar" en los registros, con lo cual dijo que las extracciones de esas partes "podría ser una manera de que nosotros no podamos identificarlo".
Asimismo, sostuvo que no había denuncias por averiguación de paradero en General Alvarado, Mar del Plata o Necochea, y dispuso extender la búsqueda a otros lugares e incluso con el Sistema Federal de Búsqueda de Personas Extraviadas.
"Pensamos que si el chiquito tiene esa edad (dos años) y no tenemos novedades, puede tener que ver con la proximidad de la familia que está implicada en esto", advirtió al portal 0223.
Los investigadores también intentaban determinar las causas de la muerte del niño que, al parecer, se produjo en los últimos diez días en fecha no precisada.
Personal de la Policía Científica bonaerense recolectó diversas pruebas en el lugar donde fue hallado el cuerpo en busca de pistas que puedan guiar a la investigación.
Asimismo, la fiscal ordenó preservar muestras de ADN del niño y enviarlas a laboratorios oficiales en La Plata para lograr su identificación con cotejos genéticos a realizarse a futuro.
