Pasó otro Mundial y el deporte nacional es motivo de orgullo, en este caso, por la Selección de Futsal que se coronó campeona del Mundo en Misiones. La alegría desbordante de un pueblo y del país entero, envolvió de gratitud a un plantel y cuerpo técnico que en total tuvo a 9 integrantes mendocinos.
Primera reflexión, la cuna del mejor futsal sigue siendo nuestra provincia. Y es tanta la algarabía que se vive a lo largo y ancho de la Argentina que la noticia llegó hasta México.
Desde ese punto del contienente americano llegó, quizás, la salutación más importante para nuestros héroes, el saludo de un tal Diego Armando Maradona. "Quiero felicitar a los muchachos de la Selección Argentina, que hoy se consagraron campeones mundiales de Futsal. ¡¡¡Muchas gracias en nombre de todos los argentinos por esta alegría!!! #mundialfutsal2019", escribió el Diez. ¿Los pibes? Doblemente chochos...
En lo netamente deportivo, a la hora de hablar de merecimientos, éstos superan ampliamente a las falencias. Argentina tuvo todo lo necesario para ser un campeón sin discusiones.Tremendo poder de fuego (con 44 goles fue la Selección más goleadora), tuvo al artillero de la competencia con 10 tantos (Diego Koltes) y al jugador más valioso (Renzo Grasso), concluyó invicta y sin dejar unidades en todo el recorrido.
En cuanto a las cosas negativas del certamen, fueron las ausencias intempestivas y casi simultáneas de Canadá y Pakistán. Una falencia organizativa notoria. Los canadienses se bajaron a horas del inicio y fueron reemplazados por los Estados Unidos. Mientras que la de los paquistaníes fue "salvada" con un conjunto misionero que permitió continuar una competencia ya muy debilitada en ese grupo.
Para destacar y colgarle el cartelito de sorpresa, lo del combinado de Sudáfrica, cuya labor fue relevante. Llegó sobre la hora a territorio mundialista y, como dato de color, ya había sacado pasajes para un día antes de semifinales ya que no tenían fe para llegar tan lejos.
Eso obligó a modificar el esquema y terminó presentándose para disputar con Paraguay el tercer puesto con sólo 7 jugadores, y tras la lesión de uno de ellos, culminó el juego con 6 futbolistas. Obviamente, cayeron por 11 a 1 pero le pusieron tanta onda al festejo del descuento demostrando que la sola competencia para ellos ya era una medalla de oro. Se ganaron el cariño del público y el respeto de todos los rivales. Como dato negativo quedó la actuación de Colombia.
El hasta el domingo vigente bicampeón mundial, se fue eliminado en cuartos de final por Brasil, que si bien fue mucho más competitivo de lo esperado, los cafeteros dieron la nota por el bajo rendimiento, aún contando con figuras como Jairo Pinilla y Betancur, dos de los máximos exponentes a nivel mundial.
En definitiva, Argentina cerró una gran actuación, un trabajo que a partir de semifinales le opuso rivales de fuste y supo sortearlos. Y al momento de hablar de la final, habrá que revisar muchas veces el penal que le otorgaron a los de Avvedutto a segundos del final, porque nadie vio la mano del brasileño, ni en el estadio ni por TV.
Todo esto alimentó rumores, nunca comprobados, que indicaban que el local llegaría si o si al a final. En consecuencia, Argentina estuvo a la altura, cumplió y aún con fallos arbitrales, fue realmente un campeón con todas las letras.
