Todos los días nos sorprendemos con la aparición de vocablos que, hasta hace muy poco, no conocíamos o que usábamos, pero sin saber si era correcto su empleo y cómo debían escribirse. Así fue cómo, no hace demasiado tiempo, comenzó a utilizarse el término “brexit”, para aludir a la salida del Reino Unido, de la Unión Europea; también, a diario y en otro orden de cosas, escuchamos y vemos escrito el vocablo “delivery”, que aplicamos correctamente.
¿De dónde se originó el primero de los vocablos y cómo debe escribirse? “Brexit” es un acrónimo inglés, formado por la unión de las palabras “Britain” (en alusión a Gran Bretaña y, por extensión, al Reino Unido) y “exit”, cuyo significado es “salida”; la traducción al español es, pues, “salida del Reino Unido, de la Unión Europea”. Como se puede observar, resulta una expresión larga y poco económica; por ello, el hablante elige “brexit”, pero debe recordar que, al escribir este acrónimo debe hacerlo en letra cursiva, por ser un extranjerismo no adaptado, o colocarlo entre comillas si no se dispone en el ordenador de aquel tipo de letra. Además, no se debe tildar el término ya que sigue siendo un vocablo de origen inglés. Lo que se debe tener también en cuenta es que se trata de un sustantivo común, por lo cual debe escribirse con minúscula inicial. En esto, debemos recordar que, en inglés, los gentilicios se escriben con mayúscula, mientras que en español lo hacen con minúscula inicial: por ello, “Britain” en inglés, pero ‘británico’, en nuestro idioma. En cuanto a su género, nos dice la Fundéu que puede considerarse ambiguo (el/la “brexit”), aunque el uso mayoritario es masculino.
Es interesante encontrar que la misma Fundéu menciona otros acrónimos similares a “brexit”: el “bremain”, de significado opuesto a “brexit”, ya que la segunda parte del término es el verbo “main”, cuyo valor es “quedarse”. El otro acrónimo mencionado es “grexit”, que alude a la salida de Grecia de la zona euro.
Vayamos al segundo término: ¡cuántas veces, por las noches de los fines de semana, nos vemos tentados por la facilidad de la comida pedida por teléfono y entregada, en pocos minutos, en la puerta de nuestras casas! Para designar este servicio, usamos el anglicismo “delivery”; en efecto, en inglés, este término significa “entrega” o “envío”. Muchas publicidades de casas de comida sustituyen el vocablo inglés y colocan “reparto” o “entrega a domicilio”, lo cual sería más adecuado si realizamos la defensa del español; pero, si se opta por el término inglés, deberemos colocarlo en cursiva o entre comillas, para señalar su origen extranjero.
La Fundéu nos aporta que también se hace extensivo este término para nombrar a la persona que realiza la entrega, pero recomienda utilizar las alternativas “repartidor, recadero, distribuidor, mensajero”, según la naturaleza del envío. Añade que, en Argentina y Uruguay, se usa el vocablo ‘motoquero’ para designar al encargado de este trabajo; además, la Academia Dominicana de la Lengua ha dado un paso adelante al adaptar el término como ‘delíveri’, con tilde por su pronunciación esdrújula, y con el cambio de la ‘y’ por ‘i’. Debemos destacar que ni el Diccionario de la Lengua Española en su última edición, ni el Panhispánico de dudas incluyen el término, a pesar de encontrarse tan asentado en el uso. En cambio, el Diccionario de americanismos, obra que también pertenece a la Asociación de Academias de la Lengua Española, incluye el término en letra cursiva, como voz inglesa, con las dos acepciones señaladas, la de “servicio” y la de “persona que entrega comida a domicilio”.