“El horno no está para bollos”, solía advertir la abuela cuando el ambiente en casa estaba tenso y había que portarse bien para no empeorar la situación. Así está Godoy Cruz por estos días. Y no sólo porque el funcionamiento del equipo sigue brillando por su ausencia, si no porque, tras la derrota ante Gimnasia en La Plata, el entrenador Carlos Mayor se puso a varios referentes en contra (léase José Luis Fernández, Federico Lértora, Claudio Aquino y Emanuel Aguilera).
El caso más resonante, fue el de José Luis Fernández, el capitán y símbolo del equipo que fue relegado al banco de suplentes en el compromiso del miércoles pasado ante River por la Copa Sudamericana. El ex Racing “retuiteó” un par de mensajes de un periodista de Radio 9 de Buenos Aires que criticaba la decisión de Mayor confirmando que el DT había sacado al jugador por la profunda autocrítica que hizo post partido ante el Lobo platense.
El tema tuvo tal resonancia que el representante de Fernández y de Mayor, Cristian Bragarnik, habría intercedido para que Joselito eliminara dichos ‘tuits’ horas más tarde.
Además de Fernández (quien ingresó unos minutos ante River), Federico Lértora, Claudio Aquino y Emanuel Aguilera fueron marginados por el entrenador.
Lo de Aquino y Lértora también causó sorpresa. En tan solo tres días, ambos futbolistas pasaron de ser titulares a ni siquiera concentrar para la cita internacional.
Pero no todo quedó allí. Porque el malestar se fue propagando del plantel hasta la dirigencia. Sucede que ese miércoles, el del día del encuentro ante River, el resto de los jugadores que no fueron convocados por el entrenador no entrenaron. Y no sólo eso. La gota que rebasó el vaso fue que, en lugar de quedar concentrados tras la agónica derrota ante el Millo (para cenar, descansar y entrenarse al otro día por la mañana, como suele hacerse), el plantel tombino fue liberado y recién volvieron al trabajo el jueves por la tarde.
Tras la práctica del jueves, José Luis Fernández rompió el silencio ante los colegas de FM 91.7 y admitió sentirse arrepentido por la situación en la que estuvo involucrado directamente. “Pasa que me dolió salir del equipo, hace un año y medio que estoy en el club y jugué todos los partidos, es feo salir”, manifestó el volante, capitán y referente de un plantel que perdió jerarquía y en el cual chicos del club que venían precedidos de buen nivel, como Angileri y Olivares, no tiene lugar en el equipo titular.
Bajo este panorama, los días de Mayor como entrenador del Expreso parecen estar contados. El partido del domingo ante Defensa y Justicia (justo un elenco que es ‘gerenciado’ por Cristian Bragarnik) pasó a ser determinante en el futuro del ex entrenador de Almagro y Atlanta. Eliminado de la Copa Argentina, con más de un pie afuera de la Copa Sudamericana, de andar irregular en un torneo de Transición por donde se lo mire, el cambio de coyuntura parece inminente e inevitable.¿Habrá llegado el momento de darle la chance a algún DT de la casa?
¿La hora del cachorro?
En tiempos cuando River y Boca apelaron a jóvenes entrenadores que fueron futbolistas ganadores de la generación reciente, Juan Alejandro Abaurre sería el apuntado por la dirigencia del Expreso para suceder a Carlos Mayor. Muchos están convencidos de que el Cachorro es el indicado para este momento.
Por lo que pudo averiguar Más Deportes, el actual DT de la Quinta división de AFA se viene perfeccionando desde hace un largo tiempo y tiene conformado un cuerpo técnico que incluye como ayudantes a Silvio Duarte y David Daine y al profe Miguel Chacón.