Basta de misterios. Basta de especulaciones. Llegó el momento de saltar al parquet del Estadio Palacios de los Deportes de la Universidad Palesca, ubicado en la ciudad de Pinsk, con capacidad para 500 personas, uno de los complejos más grandes de los deportes de alta tecnología de Europa, el cual será una de las sedes principales del campeonato.
Argentina, con la presencia histórica de seis embajadores mendocinos: Federico Pérez, Mauro Albertini, Marcelo Mescolatti, Renzo Grasso, Diego Koltes y Gonzalo Pírez, debutará hoy desde las 10 ante Eslovaquia.
Además Mescolatti, que es uno de los jugadores con más experiencia en el plantel, es el capitán del equipo. Quien no pudo estar presente y que también es un referente de la celeste y blanca es Nahuel Parada, que decidió no participar por el nacimiento de su primer hijo.
En este torneo corto, la primera fase se desarrolla en tres días. Es por eso que mañana jugará su segundo partido de la cita ecuménica ante Rusia a partir de las 12. Cierra su participación en la ronda clasificatoria ante Kirguistán el lunes desde las 11.
Este certamen marca la vuelta de un Mundial de esta disciplina deportiva a Europa luego de 15 años, ya que tras la conformación de la AMF, remplazando a la desacreditada Fifusa (con sede en Madrid y presidido en su momento por el español Antonio Alberca García), después del Mundial de Bolivia 2000, se disputaron los mundiales de 2003 en Paragua; en 2007 en Mendoza donde el combinado nacional llegó a la final ante el conjunto Cafetero y no pudo quedarse con el título. Mientras, en 2011 la sede fue Colombia.
Como en toda cita ecuménica, Argentina es candidata al título. Por esta razón, su entrenador Ariel Avveduto decidió concentrar al plantel durante meses para esta gran oportunidad.
Argentina quiere su segundo trofeo en este torneo. Es que la única vez que alzó la copa fue en 1994 con la presencia del mendocino Gonzalo Zulueta.
En la jornada de ayer, el local se midió ante Brasil y el triunfo quedó en manos de Bielorrusia por 2 a 1.