Más que tres puntos. No será un partido más el que vivirá el Tomba en Sarandí. Y es que la campaña no es buena- hace seis encuentros que no gana- y la derrota frente a Racing dejó al Turco en la cuerda floja, envuelto en rumores y trascendidos de todo tipo sobre su inminente salida del club.
Que los dirigentes le pidieron la renuncia...Que parte del plantel le soltó la mano... Que ya no tiene el respaldo de antes... Que quiere cobrar todo el contrato si lo despiden y por eso no lo echan... Que quiere terminar el torneo...
En las últimas horas se habló y se dijo de todo, pero hoy la realidad es que el entrenador estará sentado en el banco se suplentes frente a Arsenal, después de que el pasado viernes conversara con los medios y ratificara su continuidad en el cargo. El DT desmintió cualquier tipo de charlas con los directivos referida a una posible desvinculación.
“Con Manzur hablamos de fútbol, intercambiamos opiniones”, remarcó sobre la extensa charla que llevó a cabo con el vicepresidente luego del choque en el Malvinas, y que despertó un sin fin de conjeturas. Más allá de las ganas y la confianza del adiestrador por revertir la historia y salir adelante, una derrota esta tarde sería letal y no quedaría margen nada más que para su salida. Resultaría muy difícil que se mantenga en el banco con otra caída sobre sus espaldas.
Mientras Asad se debate entre seguir o continuar, aparecen varios apellidos para reemplazarlo. El más fuerte es el de Eduardo Berizzo, aunque también sonaron Jorge Burruchaga y Rodolfo Arruabarrena.
Lo más llamativo es que hace días el conductor reconoció que junto al presidente, Mario Contreras, ya estaban diagramando la pretemporada para el año que viene, fecha prevista de inicio para el 4 de enero. Asad tiene contrato hasta junio del 2013.
No hay dudas que el compromiso contra el elenco de Gustavo Alfaro es fundamental. Otro paso en falso profundizará al crisis futbolística y tal vez marcará el final de la segunda etapa del Turco en la Bodega, mientras que un triunfo le dará un poco más de aire y tranquilidad para lo que viene, aunque seguramente los rumores sobrevolarán el Gambarte cada día.