Tupungato: placita abandonada ahora es un parque infantil

La comuna la revalorizó e instaló juegos, un miniteatro y hasta un castillo de princesas diseñado por una vecina.

Tupungato: placita abandonada ahora es un parque infantil

"¡Parece un castillo, está buenísimo! Ahora faltan más juegos para chicos de nuestra edad", comentó Magalí Estrella (13), mientras cuidaba a su hermanita Liz (3), que hacía fila en el tobogán. Miles de niños han pasado en las últimas semanas por esta placita de juegos en Tupungato, que estaba olvidada, y ahora ha devenido en un parque infantil.

Desde hace décadas, este espacio recreativo sobre la calle Belgrano estuvo destinado a los más pequeños. Sin embargo, desde fines de los ‘90 no había sido sujeto de una reparación o refuncionalización.

“Parece que recién estrenada, esta plaza ya quedó chica”, mencionó Carmen Delgado, mientras trataba de ubicar a sus nietos entre los muchos pequeños que corrían por el nuevo miniteatro. Donde ahora está el escenario, antes había una pista que usaban de cancha de fútbol. El objetivo de la comuna es llevar obras infantiles de teatro y títeres al lugar.

La refuncionalización del parque requirió una inversión de 2,38 millones de pesos. Salvo el equipamiento y los juegos, que fue encargado a una empresa del rubro, todo las tareas fueron llevadas a cabo por los mismos empleados de la municipalidad, de las áreas de Diseño y Obras Públicas.

Incluso, el diseño de las torres de un castillo de princesas -que conforman el pórtico del lugar- fue propuesto por una vecina, que presentó años atrás el dibujo y proyecto a la comuna.

El lugar ahora está rodeado de rejas, lo que generó polémica. Algunos hasta hablaron de la "privatización" de   los espacios públicos.

A fin de mantener el cuidado y limpieza del lugar, la comuna cerró con altas rejas todo el perímetro del parque infantil. Esta decisión generó ciertos cuestionamientos y rechazos al principio. Incluso algunos vecinos subieron mensajes en las redes en contra de la “privatización” de los espacios públicos.

“Queríamos recuperar el espacio para los niños. Este lugar había sido ganado por algunas prácticas que queríamos erradicar. Queremos preservarla de la droga, del vandalismo, de la falta de seguridad y este cerramiento era la mejor alternativa”, explicó el intendente, Gustavo Soto. Hay más luz, las rejas han respetado el estilo anterior y las puertas se abren temprano y cierran, depende de la cantidad de visitantes, a las 21.

El espacio tiene nuevos juegos combinados, toboganes espiralados y aparatos adaptados para chicos con discapacidad motora. En el sector pensado para los papás o los más grandes se dispusieron juegos de mesas y sillas para que puedan compartir unos mates o una merienda. Además, en las mesas está el diseño de juegos de mesa.

En este rincón hay un quiosco, que dejó de usarse con ese fin décadas atrás y había devenido en un depósito municipal. El intendente señaló que han iniciado los trámites para lanzar dentro de poco la licitación para ver qué comerciante de la zona se hace cargo del local. "La idea es que se vendan golosinas y artesanías relacionadas con los más chicos", agregó.

Para la limpieza y mantenimiento se asignó un cuerpo de cuidadores compuesto por vecinos y vecinas.

Ante el reclamo actual de un espacio para jóvenes, desde la comuna adelantaron que están proyectando un parque para skaters y bikers. También, el municipio ha encargado conjuntos de juegos nuevos para plazas de distritos y zonas periféricas de Tupungato.

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