Dentro de unos meses, los valletanos podrán disfrutar de las películas nacionales que están en cartelera en todas las salas del país, pero también de las mejores propuestas que hoy ofrece el séptimo arte internacional. En el nuevo auditorio de Tunuyán, ya está tomando forma una sala de cine 'premium', que tendrá tecnología digital de avanzada, sonido de última generación y pantalla en 3D.
La posibilidad de ver en un pueblo del Valle de Uco el mismo film y con igual tecnología que en cualquier shopping o centro comercial del Gran Mendoza, fue posible gracias a un convenio firmado entre la comuna y el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales.
La primera tendrá que hacer algunos ajustes a su obra básica del auditorio municipal -un edificio de más de 1.800 metros cuadrados- y el Incaa se ocupará de dotarla del equipamiento y la tecnología. Después, recibirá un pequeño porcentaje de las entradas que se vendan.
De esta manera, Tunuyán se adelantó a sus municipios vecinos y parece que será el primero en el Valle en instalar un cine con tecnología de avanzada. Tupungato lo viene intentando desde que avaló el derrumbe del viejo Cine Artemisia en 2011 y relegó la empresa a manos de un privado.
San Carlos, en otra sintonía, busca ahora que sean las entidades culturales del departamento las que administren el cine teatro Real de La Consulta.
De nivel internacional
El próximo cine tunuyanino tendrá capacidad para 689 personas sentadas y será una sala digital con sonido Dolby 7,1 y sala 3D, por lo que responde a los estándares de cines digitales a nivel internacional.
En realidad se tratará de un 'Multiespacio Incaa'. Éste fue uno de los pedidos en los que insistieron los funcionarios de Tunuyán, pues quieren que este lugar también sea utilizado por grupos de danza, teatro o música locales, para que puedan exponer su trabajo artístico.
Por ello, han solicitado que la pantalla -que tendrá una dimensión de 15 x 8 metros- responda a un sistema de izamiento. "Esto permitirá que se use como cine, pero que también desaparezca cuando se realice allí otro tipo de eventos", apuntó Enrique Romero, secretario de Gobierno de la comuna.
Este 'multiespacio' funcionará en el auditorio que el municipio construye detrás del Centro de Congresos y Exposiciones Carlos Alonso. Tras realizar varias inspecciones y mediciones en el lugar, los técnicos de Incaa decidieron incluir a este departamento entre las 30 salas seleccionadas para crear en el país.
La comuna -además de encontrar personal idóneo para el funcionamiento de la sala- deberá reacondicionar el sitio en miras a este uso: montar el escenario, trabajos de acustización y colocar cortinas que oscurezcan este salón de 25 metros de ancho.
"La inversión que implican estos arreglos se incluirá dentro de una redeterminación del precio inicial de la obra del auditorio", apuntó Romero.
Por su parte, el Incaa ya realizó la licitación para dotar al espacio de la tecnología necesaria. Incluso uno de los proveedores está por llegar al departamento para inspeccionar el sitio. Ellos deberán sumar, entre otras cosas, el sistema de sonido 7,1, el gran proyector, la pantalla y los sistemas de izamiento, etc.
Se estima que el costo total de esta obra rondará los 5 millones de pesos. El funcionario puntualizó que de lo recaudado, el Incaa se lleva un porcentaje y el resto debe ser utilizado para asegurar la autosuficiencia del funcionamiento de la sala. "No puede ser destinado a otras áreas municipales", dijo.
En cuanto a la programación, quedará a criterio de la comuna. Romero explicó: "Queremos pasar un porcentaje de películas nacionales, pero también hacer convenios con distribuidoras internacionales".
Otros caminos hacia la pantalla grande
San Carlos estuvo a punto de perder -hace poco más de un mes- la concesión del cine teatro Real de La Consulta. Sucede que la familia dueña del edificio pretendió subir el alquiler y el municipio no estaba en condiciones de responder a esa cifra. En ese distrito dicen que fue la presión social, más que los requerimientos del Departamento Ejecutivo, lo que hizo que los propietarios dieran marcha atrás con la decisión.
Por estos días, el municipio ha convocado a las entidades culturales del departamento (escuelas artísticas, de danza, centros culturales, etc.) para que conformen una comisión social que se haga cargo de la administración del espacio. Además de democratizar su uso, esta medida busca compartir los gastos que implica sostener el lugar.
Por otro lado, el anhelo de los tupungatinos por volver a las tardes y noches de cine que vivían en el Artemisia, viene de larga data. Sin embargo, el centro comercial que se iba a edificar en el mismo predio está frenado desde hace tiempo. Es una obra muy ambiciosa que busca levantar una especie de shopping a cielo abierto, con locales comerciales y salas de cine.
El mismo inversor de Buenos Aires luego anunció que primero abriría una sala cinematográfica -de menores dimensiones- en otro centro comercial que está dentro de la estación de servicio, que su firma está por inaugurar en el ingreso a este departamento.