Un fuerte malestar existe entre los empleados de la comuna de Tunuyán. A través de decretos, el intendente Martín Aveiro aplicó recortes de ítems salariales que afectan a una gran parte de la planta de personal. Mientras el Ejecutivo habla de una "regularización" en función de las horas trabajadas y una disminución promedio del 7%, la oposición y los gremios denuncian bajas de hasta 20% en los sueldos municipales.
Apenas conocieron la noticia, grupos de empleados pidieron ante el intendente y concejales que se dé marcha atrás con la medida. Durante la jornada de ayer, tanto en la explanada como en el parque municipal, mantuvieron reuniones con referentes sindicales locales y provinciales. Por su parte, la delegación departamental de ATE esperará tener la información oficial para convocar a asamblea.
Los recortes, que comenzarán a percibirse en los haberes de setiembre, se fundan sobre tres items. El decreto oficial eliminó de raíz la asignación salarial dispuesta desde hace años bajo el concepto "tareas especiales" y limitó -sólo a los oficios que encierran un peligro real- el plus por "trabajo de riesgo". Los únicos que no sufrieron recorte son los contratados.
Pero la medida que más preocupa -por tener un alcance más generalizado- es la baja del 20 %en el rubro 'mayor dedicación', un ítem que la mayoría de los municipios utilizan para compensar los magros salarios que sostienen. Según la resolución del gobierno departamental, ahora los tunuyaninos que percibían el 100 por ciento de mayor dedicación (6 horas en el turno tarde) ahora tendrán el 80% y así sucesivamente. A los únicos que no se les modificará este concepto, será a quienes recibían el 30% de este beneficio.
"Nuestros salarios ya estaban entre los más bajos de la provincia. La gente expone que no podrá afrontar las deudas contraídas y ni hablar de quienes son jefes de hogar. Hay sueldos de $ 5.500 que van a bajar a $ 4.000", sostuvo el edil radical, Paulo González.
"No es una decisión que nos guste tomar, pero necesitamos ajustarnos porque hemos sufrido una importante baja presupuestaria", expuso el secretario de Gobierno de Tunuyán, Enrique Romero. El funcionario dijo que llevan más de un mes estudiando la medida y fue la única solución pues el departamento enfrenta recortes y demoras en el pago de la coparticipación provincial y nacional y otro tanto sucede con la recaudación. No hay miras de que vaya a mejorar. En el último mes, la municipalidad cambió su sistema de control laboral: pasó del marcado con tarjeta y reloj a un escaneo de rostro ubicado en tres terminales conectadas en red con la oficina de recursos humanos. Romero argumentó que el nuevo sistema les permitió "observar que había una gran cantidad de personas que no cumplían con las horas abonadas".
Aveiro también decidió bajar su sueldo y el de los funcionarios un 10%. Desde el bloque radical, dijeron que se bajarán un 20% "como el resto de los empleados".
Roberto Persia de ATE manifestó que la solución no es sacar plata de los sueldos de los trabajadores ("que ninguno llega a los $ 7.000"), sino "gestionar dinero en otros niveles". El gremialista dijo que los empleados están ahogados entre los bajos salarios y la mala prestación de OSEP.
Por su parte, el radicalismo local expuso que Aveiro tiene otras opciones como "reducir a la mitad la cantidad de contratados (son 400) o rescindir el cuestionado convenio con la empresa de servicios Santa Elena".
Recorte
Esta disminución salarial afecta sólo a empleados de planta, no a contratados. El municipio no tiene injerencia de modificar los acuerdos salariales logrados en paritarias. Lo que modificará serán tres ítems.
Mayor dedicación. Habrá una baja del 20 por ciento generalizada. Los que gozaban del 100% (6 hs extra) bajarán al 80% (4 hs); los que percibían el 80% ahora trabajarán 3 horas y los que cobraban el 50% ahora tendrán el 30%. Los que tenían el 30 por ciento no percibirán cambios.
Tareas especiales. Este rubro será erradicado en todos los sueldos. El oficialismo dice que era "muy subjetivo", porque lo decidía cada director. La oposición sostiene que muchos servicios municipales (cementerio, transporte escolar, etc.) se verán afectados.
Trabajo de riesgo. Sólo quedará para las tareas que realmente implican peligro (electricidad, manejo de dinero, etc.)
