Federico Méndez es, por méritos, el ícono del rugby mendocino, y reconocido a nivel nacional e internacionalmente. El ex jugador del Mendoza RC (donde hoy es el entrenador de la primera división) y que pasado mañana cumplirá 45 años, tiene en sus espaldas tres copas mundiales y una gran cantidad de títulos logrados en los clubes donde participó, tanto en Europa como en Oceanía. Fue el primero, con 19 años participaba del primer Mundial, el segundo en la historia de estos torneos, que se disputó en el Reino Unido, principalmente en Inglaterra.
“Fueron tiempos muy vertiginosos” arranca diciendo el ex jugador de los Conejos. “Me acuerdo que en el año 90 me convocan a Los Pumitas, yo siendo un año más chico y al final terminé quedando en ese equipo que después fue el que más jugadores le dio al equipo de Los Pumas. Me acuerdo que era un buen grupo, con jugadores de experiencia. El tema es que después de un panamericano con los juveniles y me convocan a la gira de Los Pumas por el Reino Unido”.
Y agrega: "Me acuerdo que cuando entregan la lista para la gira yo no estaba. Un día jueves yo me estaba yendo a la escuela y me avisan que Hugo Céspedes, que era uno de los convocados, podía tener meningitis y si se confirmaba yo iba en lugar de él y finalmente se dio así. Es decir que yo un jueves estaba yendo al colegio y al otro día estaba viajando a Buenos Aires, para sumarme al plantel para el sábado partir al Reino Unido, increíble y vertiginoso".
-¿Y qué te acordás de aquella gira?
-Estaba Miguel Bertranou, yo era muy chico y para mi era todo nuevo y por suerte Miguel me dio una mano. Por ejemplo en ese equipo estaba Diego Cash que nosotros lo teníamos en los posters en nuestra habitación. Cuando llegamos a Inglaterra los medios le hacían notas a Hugo Porta que en ese momento tenía 39 años y a mi por ser el más chico, era todo muy nuevo para mi. De todas maneras fue una gran experiencia para mi. En ese plantel íbamos dos por puestos y en la primera semana se lesiona el hooker titular y así terminé jugando yo, increíble pero fue así, el famoso partido ante Inglaterra fue el debut.
Y fue tan estrepitoso ese comienzo con Los Pumas que al año, con 19 años recién cumplidos Fede Méndez estaba viajando, nuevamente al Reino Unido, para disputar el mundial, el primero de su carrera: "Si fue increíble. No teníamos un buen equipo y habían algunos problemas extras, pero se hizo lo que se pudo pero no pudimos clasificar a los cuartos de final".
Sin embargo a la hora de destacar alguno de los tres mundiales que jugó, el ex jugador de Los Pumas no duda: "Para mi el que más me gustó fue el de 1995 que se jugó en Sudáfrica. Es que me acuerdo que nos preparamos muy bien y teníamos un buen equipo, pero durante la gira previa se lesionaron Santiago Meson y Gonzalo Camardón y ahí perdimos juego en los backs. Anduvimos bien con los forwards pero sentimos esas lesiones".
Y agregó: “Pero además ya en ese Mundial se empezó a hablar de que se venía el profesionalismo y de hecho en enero el 1996 se anuncia el inicio de la nueva era profesional”.
Podrían haber sido cuatro los mundiales para Federico Méndez, pero una lesión en el tendón de aquiles lo dejó afuera: “Por cómo venía jugando y cómo estaba entrenado, no tenía dudas de que ese mundial iba a ser el mejor para mi. Había tenido una gran temporada con el Northampton en Inglaterra y estaba muy motivado, pero unos meses antes me corté el tendón de aquiles y no pude estar. Fue una gran tristeza porque estaba seguro como venía que esa iba a ser una gran Copa del Mundo para mi”.
Sin embargo para el mendocino el siguiente Copa tuvo sabor a revancha: “En el 2003 fue una revancha porque no me quedó nada por jugar, fueron 15 años en los que di todo y el último partido fue el recordado empate ante los Lions en el 2005 (25-25). Y en el medio de estos dos años tuve la satisfacción de lograr el Campeonato argentino de Mayores, con el seleccionado mendocino, que es el único que tiene el rugby provincial”.
Al ser consultado si en su vasta experiencia le había quedado algo en el tintero, aseguró: “No me ha quedado nada. Viví las distintas etapas del rugby. Pasé del amateurismo al profesionalismo y he tenido la suerte de ganar muchas cosas”.
Así lo contaba Los Andes
Entre el año ‘90 y el ‘95, Los Andes reflejó grandes momentos del Conejo más famoso, como cuando fue convocado para jugar con el Resto del Mundo en dos oportunidades, la convocatoria al Mundial de 1995 y su nominación para los premios Huarpes de 1992 donde también se quedó con la Cruz al Mérito como el deportista más destacado del año.