La Corte de Apelaciones del Segundo Distrito de Nueva York rechazó ayer un pedido de los holdouts para que ese tribunal levante la medida cautelar que bloquea eventuales embargos y le permite a la Argentina mantener el pago regular de sus vencimientos de deuda reestructurada, hasta se resuelvan todas las apelaciones planteadas.
Según consta en la Resolución, el tribunal no hizo lugar al reclamo de los holdouts que pretendían que se deje sin efecto la medida cautelar para, de esta forma, tener a su disposición la posibilidad de embargar cuentas del país.
En una breve Resolución, el tribunal de alzada neoyorquino remitió a los solicitantes al fallo del 23 de agosto, cuando ratificó el “stay” (espera) hasta el pronunciamiento de la Corte. Al respecto, el secretario de Finanzas, Adrián Cosentino, afirmó que la decisión judicial “despeja los planteos que intentan instalar los fondos buitre sobre el camino propuesto por la Argentina para garantizar a sus acreedores el normal cumplimiento de la deuda”.
“La resolución de la Cámara confirma que las acciones procesales seguidas por el país son las correctas y ratificamos que la Argentina ejercerá su defensa en todas las instancias judiciales disponibles”, sostuvo Cosentino.
El funcionario señaló que “esperaremos ahora las resoluciones pendientes, la solicitud de un fallo plenario y luego, en su defecto, la presentación ante la Corte Suprema de los Estados Unidos”.
Los acreedores pretenden cobrar 1.330 millones de dólares por los fallos favorables de primera y segunda instancia ya dictados por la justicia neoyorquina. Ahora, la Corte de Apelaciones ratificó la vigencia de la medida cautelar hasta tanto se complete el proceso judicial, que aún cuenta con varias instancias antes de quedar con sentencia definitiva.
Aún se debe resolver el pedido realizado por la Argentina para que un plenario de 13 jueces de Nueva York evalúe la sentencia que condenó al país a pagar el 100% de los títulos en manos de acreedores en un solo acto.