Tres policías que se dedicaban a "vender" licencias de conducir y cinco civiles que habrían pagado las coimas solicitadas para conseguir el ansiado carnet, deberán enfrentar ahora un juicio oral y público por el delito de cohecho (coimas).
Los policías que deberán ir a juicio son la principal Verónica Nélida Camargo Guardia que trabajaba en la Policía Vial de Maipú; el uniformado Darío Alberto Carrizo López y el ex policía José Luis Silva.
Los tres están imputados en cuatro casos por dos delitos: incumplimiento de los deberes de funcionario público y cohechos activos (coimas).
Carrizo y Silva están señalados como partícipes primarios de los hechos y como instigadores de los delitos. En cambio, Camargo está imputada por cohecho pasivo.
Los civiles implicados en las maniobras son Jorge Antonio Panella Olivera, Dante Marcelo Zalazar Morales, Verónica Mariela Pellizón Tamargo, Ariel Alfredo Jofré Montenegro y Pablo Nicolás Guardia Mercado. Todos están imputados por cohecho pasivo.
Ayer, durante la audiencia en la que se trató la elevación a juicio de la causa, los abogados de Silva, Zalazar y Pellizón presentaron distintas oposiciones que fueron rechazadas por la investigadora de caso, la fiscal Claudia Ríos, y luego por el juez David Mangiafico, del Sexto Juzgado de Garantías.
Tras un corto receso, el magistrado evaluó el caso y decidió elevarlo a juicio no sólo por los delitos de cohecho e incumplimiento de los deberes de funcionario sino también por falsificación de instrumento público.
Modus operandi
Según consta en el expediente el ex uniformado Silva era una suerte de "gestor" que entregaba tarjetas con su número telefónico, ofreciéndose a contactar con policías que trabajaban en la entrega de carnets, previo el pago de un dinero que se fijaba según las necesidades del "cliente".
Cuando el cliente aceptaba, Silva lo contactaba con Carrizo, quien iniciaba el trámite y luego los citaba al edificio de la calle Sarmiento, donde era finalmente entrevistado por la principal Camargo.
Luego, la licencia que se entregaba era totalmente legal pero su poseedor nunca debía rendir el examen teórico correspondiente.
Escuchas comprometedoras
En una de las escuchas telefónicas queda claro cómo se realizaba la maniobra. En la desgrabación habla Pablo Guardia -uno de los civiles imputado- con el ex policía Silva.
Guardia le dice que ha rendido mal el examen teórico y Silva le responde que se vuelva a presentar para rendir de nuevo en Maipú y que se presente ante la principal Camargo. Días después el hombre consiguió que le dieran un carnet de forma legal.
La investigación comenzó a principios de 2015 cuando se conocieron una serie de denuncias en las que policías pedían coimas por entregar licencias de conducir a personas que por distintos motivos no podían aprobar los requisitos establecidos para el trámite. En ese momento la Fiscalía de Estado hizo llegar a la fiscal Ríos un escrito para que investigara el asunto.
En setiembre de ese año unos 16 policías en actividad, 40 particulares, responsables de seis academias de conductores y cinco "gestores" (3 de ellos ex policías exonerados) quedaron involucrados en una megacausa.
La causa que ahora se acaba de elevar a juicio es sobre las presuntas irregularidades ocurridas en la Dirección de Seguridad Vial de Maipú.
Allí era donde se desempeñaba Camargo como segunda jefa policial y encargada de aprobar a los postulantes. Entre las medidas ordenadas por la fiscal se encuentran allanamientos en la casa de los uniformados, secuestro de teléfonos y documentación.