Tres hermanos se salvaron de milagro tras desatarse un incendio en una precaria vivienda en San Rafael. Un niño de 2 años sufrió quemaduras en el rostro y cuerpo mientras que los hermanos de 3 y 4 años tuvieron intoxicación por monóxido de carbono y quedaron internados en la unidad de terapia intensiva pediátrica.
El fuego que afectó la vivienda de la Familia Pérez en Cantoni al 1145, en las inmediaciones del barrio el Molino, se desató a causa de un cortocircuito justo en el momento en que la madre había salido unos minutos a comprar a un quiosco cercano y los niños quedaron solos.
Este es el segundo siniestro que ocurre en 48 horas en el que menores fueron rescatados justo a tiempo y además deja a una familia en la calle.
El incendio anterior afectó completamente a una vivienda en Espinelli 804, en la zona de El Cerrito. En fuego comenzó por una pérdida de gas en la garrafa, los integrantes de la familia Cerna, la madre y cuatro de los siete hijos, lograron salir a tiempo. Lo que no pudieron salvar fueron sus pertenencias.
Por la electricidad
Alrededor de las 20, Karen (24) dejó a sus hijos solos por un minuto para ir a comprar a un negocio que está a un paso de la casa. Fue en ese momento que el fuego empezó a invadir la humilde vivienda (con techo de tablas y nylon) y por suerte una vecina vio las llamas y el humo que emanaba desde el interior y corrió desesperada para socorrerlos.
Cuando arribó el personal de bomberos se encontró con los tres niños recostados en el suelo y uno de ellos totalmente inconsciente.
“Al llegar al lugar del siniestro el fuego estaba declarado y se trabajó por media hora para extinguir las llamas. Hubo afectación de todo lo que estaba dentro de la casa porque además era pequeña, 18 metros cuadrados”, remarcó el subcomisario Claudio Esquivel, Jefe de bomberos de la zona Sur.
Si bien no descartan que el nene de 4 años pueda haber iniciado el fuego mientras jugaba, todo indica que se trató de un cortocircuito.
La casa tenía un sistema muy precario para proveerse de energía eléctrica y de acuerdo a la información policial, les estaban suministrando corriente a través de un alargue conectado a una propiedad vecina.
Los niños fueron trasladados al hospital Schestakow, una pequeña de 3 años y su hermano de 4 sufrieron intoxicación por la inhalación de por monóxido de carbono y otros elementos químicos que se encontraban en el interior de la vivienda. Ambos están internados en terapia intensiva pediátrica.
Al menor de los hermanos, un niño de 2 años, lo internaron en el ala de atención pediátrica con quemaduras en el rostro y parte del cuerpo.
Según el último parte médico que brindaron desde el hospital sanrafaelino, los tres menores evolucionan favorablemente y se encuentran fuera de peligro.
Pérdida de gas
Los integrantes de la familia Cerna, Juana y los siete hijos, también salvaron la vida milagrosamente.
Una pérdida de gas en la garrafa y una estufa a leña cercana se convirtieron fueron el detonante del incendio que terminó arrasando con toda la propiedad.
Cuando la mujer notó el olor a gas, intentó detener la pérdida pero fue demasiado, las llamas diminutas en derredor de la garrafa crecieron y se propagaron vorazmente y lo único que pudieron hacer fue escapar del fuego.
Fue tal intensidad del incendio que los cuatro niños que estaban en ese momento en la casa terminaron con el pelo chamuscado.
El siniestro, además de reducir a cenizas todas las pertenencias de la familia provocó daños estructurales serios en la casa y Defensa Civil de la municipalidad tuvo que derribar la planta alta ante el peligro de derrumbe.