La licencia por maternidad para las trabajadoras asalariadas del sector privado tiene en nuestro país una duración de 90 días y la financia Anses. En tanto, la de paternidad es de apenas 2 días y se hace cargo el empleador.
El Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec) elaboró una propuesta para extenderlas de modo gradual y llegar, en 2030 y de modo progresivo, a los 98 días para las mujeres y 30 para los hombres.
Gala Díaz Langou, directora del Programa de Protección Social de la entidad, detalló que esta semana el documento -que incluye un análisis de cómo el Estado puede financiar esta extensión- será presentado en el Ministerio de Trabajo de la Nación y en el Congreso Nacional.
La iniciativa contempla además, como un elemento novedoso, la implementación de una licencia familiar, que podrán utilizar tanto la madre como el padre, pero también tíos o abuelos que quieran y puedan hacerse cargo del cuidado del niño.
La idea es que sea un tiempo -empezaría con 15 días en 2018 para llegar a los 60 en 2030- que sea utilizable de modo flexible, como un banco de horas, al punto que podría optarse por una jornada laboral reducida durante un tiempo, que podría usar quien la familia decida.
Díaz Langou destacó que la licencia por paternidad se extiende mucho más que la por maternidad porque se apunta a favorecer el cuidado co-parental, ya que hoy la carga fundamental de la tarea de cuidado recae sobre la mujer.
Esto, además de dejar menos tiempo disponible para ella para su desarrollo personal, se traduce también en una discriminación en el mercado laboral.
Menos de la mitad accede
Aunque la Ley de Contrato de Trabajo fija la duración de las licencias por maternidad y por paternidad para los trabajadores asalariados del sector privado, los del sector público suelen tener un régimen especial.
En Mendoza, las empleadas del gobierno provincial cuentan con cuatro meses cuando son madres y los empleados con siete días al ser padres.
Un dato llamativo que presenta el documento “Más días para cuidar: Una propuesta para modificar el régimen de licencias desde la equidad” es que en el país sólo 47% de los trabajadores y 51% de las trabajadoras pueden tomarse estos días y cobrarlos.
Esto, porque el resto trabaja de modo independiente y pierde ingresos cuando se toma un tiempo, o lo hace de modo informal y no cuenta con los debidos aportes.
De ahí que los investigadores del Cippec propongan que las licencias sean universales, con independencia de si la persona trabaja en relación de dependencia, de manera independiente o está desocupado.
Si bien para este último caso existen la Asignación Universal por Embarazo y por Hijo, los padres cobrarían la diferencia con el Salario Mínimo Vital y Móvil.
Un avance insuficiente
La abogada Eleonora Lamm, subdirectora de Derechos Humanos de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza, consideró que esta propuesta es un avance porque los períodos actuales de licencia son muy breves, pero que debería ajustarse a las leyes de Matrimonio Igualitario y de Identidad de Género. Por otra parte, señaló que no rompe con la lógica del patriarcado.
Lamm indicó que debería contemplarse una licencia por parto, para permitir la recuperación física luego de dar a luz, y otra para el cuidado del niño, que no debería estar asociada a la mujer sino que podría decidirse en cada familia o pareja quién se encarga de esta tarea.
La abogada planteó que existe una vinculación naturalizada entre gestación, dar a luz y cuidado, que se atribuye a la mujer. Esto favorece que ella dedique el doble del tiempo que el hombre a las tareas de cuidado y del hogar, y que esta distribución sea aún menos equitativa mientras los niños son pequeños.
De hecho, cuando la madre vuelve a trabajar, la mayoría de las veces es otra mujer, familiar o alguien a quien se le paga, quien se dedica a estar con los hijos.
Por otra parte, las leyes de Matrimonio Igualitario y de Identidad de Género ofrecen el marco para que dos mujeres o dos hombres tengan un hijo, o incluso un hombre (transexual) geste un bebé.
Por eso -si bien en el documento del Cippec se menciona la necesidad de ir a un régimen que contemple los casos de adopción y reconozca la existencia de familias no tradicionales-, Lamm opinó que sería más adecuado que, en lugar de mencionar madre o padre, o fijar licencias por maternidad y paternidad, se hable de personas.
La propuesta del CIPPEC
El Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec) propone alcanzar los 98 días de licencia por maternidad, 30 por paternidad y 60 de licencia familiar de manera gradual desde 2018 hasta 2030. La gradualidad en la implementación obedece al costo fiscal que esta propuesta tiene para el Estado nacional.
Paso 1: 98 / 15 / 15
En primera instancia se plantea en 2018 extender las licencias por maternidad a 98 días, y las licencias por paternidad a 15 días. Asimismo, se propone crear una licencia familiar de uso indistinto de 15 días. También se incluiría a los trabajadores independientes formales dentro del régimen de licencias.
Paso 2: 98 / 20 / 30
Para 2022 se contempla extender la duración de las licencias por paternidad a 20 días y las licencias familiares a 30 días para aquellos que trabajan en la economía formal.
Paso 3: 98 / 25 / 45
El siguiente paso en la ampliación gradual de la reforma se propone para 2026. En esta instancia, la propuesta contempla la extensión de la licencia por paternidad a 25 días y la licencia familiar a 45 días en un régimen universal.
Paso 4: 98 / 30 / 60
Finalmente, en 2030 se alcanzaría el escenario deseado de 98 días de licencia por maternidad, 30 días por paternidad y 60 días para uso indistinto de cualquiera de los dos progenitores, como derecho de todas las personas ante el nacimiento de un hijo.