El día después del sonoro cacerolazo en distintas ciudades del país como respuesta a la decisión judicial de otorgar prisiones domiciliarias para descomprimir el hacinamiento carcelario, la consigna surgida desde la Quinta presidencial de Olivos fue clara: evitar la confrontación con los caceroleros para no amplificar la polémica.
El presidente Alberto Fernández ayer dejó por un rato Olivos para trasladarse hasta San Martín (al noroeste del conurbano bonaerense), donde visitó una autopartista que por la emergencia del Covid-19 empezó a fabricar barbijos y cofias. Con pocos medios presentes, durante el recorrido por la fábrica Barack Mercosul, Fernández felicitó a los industriales que se reconvierten y a los trabajadores en su día, dijo que como peronista iba a saludar a distintos dirigentes sindicales, y pasó por alto el cacerolazo.
La ministra de Justicia, Marcela Losardo, designada como la vocera para este tema, había expresado la postura del gobierno nacional: al cacerolazo "hay que tomarlo con atención, hay que atenderlo y entenderlo", dijo la funcionaria (de mucha confianza con el Presidente).
"El Poder Ejecutivo no detiene ni excarcela gente, es una tarea del Poder Judicial. Por eso, de ahí a plantear que tiene que ver con una liberación masiva de presos por parte del Ejecutivo me parece injusto", sostuvo Losardo entrevistada por TN.
En el entorno presidencial sostienen que la controversia fue fogoneada por la oposición y un sector de la prensa. Así lo transmitió a este diario una fuente gubernamental consultada. "Si se plantea que el Poder Ejecutivo libera masivamente presos, no ayuda porque es un error, porque no es verdad", insistió Losardo en esa dirección.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) recomendó que los gobiernos otorguen "libertades excepcionales para presos de menor peligrosidad como medida preventiva por contagios de Covid-19". Igual recomendación hizo la Organización Mundial de la Salud. "En Brasil fueron liberados 4 mil presos y unos 8 mil en España", argumentó Losardo.
Una “campaña mediática”
El miércoles, el presidente Fernández publicó una serie de tuits para responder a quienes acusan al Gobierno de favorecer una liberación masiva de presos. "En Argentina, la solución del problema está en mano de los tribunales. Son los jueces naturales quienes, de considerarlo necesario, disponen libertades. Las Cámaras de Casación han hecho muy oportunas recomendaciones para hacer frente al problema", escribió.
También dijo que "una campaña mediática se desata acusando al Gobierno que presido de querer favorecer la libertad de quienes han sido condenados". El cacerolazo del jueves, pese a las aclaraciones presidenciales, pareció dirigido al Gobierno y no tanto a la Justicia.
El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, también habló ayer pero apenas hizo mención a la controversia en medio de una entrevista: "Hay que prestarle atención (al cacerolazo); no estamos de acuerdo con la liberación de violadores y abusadores", remarcó. Quedó claro la consigna: no confrontar con parte de la ciudadanía que se expresó el jueves a la noche.
En Olivos lamentan que controversias como las de los presos o la ocurrida a principios de semana con la negativa de cuatro gobernadores a permitir caminatas recreativas en los centros urbanos, pese a la habilitación presidencial, minimicen otras acciones gubernamentales. Citan la conversación del miércoles entre Fernández y Merkel que consolida una impensada alianza entre Buenos Aires y Berlín; o el hecho de que Argentina esté entre los países con menos cantidad de casos mortales por Covid-19 por millón de habitantes.
Al Gobierno le espera otra semana intensa: el 10 de mayo vence la última prórroga a la cuarentena dictada el 20 de marzo pasado. Ya se preparan nuevas rondas de consultas para evaluar qué se hará. En los próximos días habrá una nueva reunión de la mesa interministerial que evalúa la evolución de las políticas ante la emergencia sanitarias. Fernández también consultará a la decena de expertos en epidemiología que lo asesora. Y seguramente la palabra final sobre cómo continuará la cuarentena surgirá tras otra conferencia virtual del Presidente con los gobernadores.