Las negociaciones de empresarios y trabajadores del sector aceitero concluyeron hoy sin que se arribara a un acuerdo, por lo que las partes volvieron a ser convocadas a un encuentro el lunes a las 16 en el Ministerio de Trabajo, informaron fuentes gremiales.
El mismo lunes 1 de junio, el conflicto podría profundizarse si se tiene en cuenta que la CGT San Lorenzo resolvió un paro total de actividades, que extendería la huelga al Sindicato regional, que hasta el momento no adhería a la medida que la Federación viene realizando desde hace 25 días.
El paro de actividades que mantienen los trabajadores aceiteros comenzó hoy a impactar en el precio de la soja a nivel internacional, ya que la oleaginosa cerró en el Chicago Board of Trade (CBOT) a 343 dólares/TN con una suba del 1 por ciento para los contratos con entrega en julio.
Los precios de hoy ese mercado de commodities reflejan los efectos de la caída en la oferta de las plantas argentinas y ha afectado el cumplimiento de los contratos de venta de las empresas aceiteras exportadoras.
De acuerdo con la descripción brindada por empresarios del sector "hay 86 buques en espera, de los cuales 39 no pueden zarpar como consecuencia del cierre del canal principal y hasta que no se termine el dragado".
"Hay otros 15 naves aguardando que se solucione el conflicto para poder comenzar con su carga y hay otros 34 barcos que están fondeados en el Río de la Plata aguardando la autorización para poder subir aguas arriba y llegar a los puertos de embarque", indicaron fuentes empresarias.
A todo esto, empresarios aceiteros y dirigentes del sindicato que encabeza Daniel Yofra negociaban un incremento de salarios para el sector. De acuerdo con algunas versiones, los representantes de los trabajadores habrían bajado sus pretensiones de aumentos del 36 por ciento y estarían dispuestos a aceptar una cifra cercana al 30 por ciento.
Por su parte, Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) solicitó "la resolución inmediata del conflicto aceitero, a través de los canales institucionales, evitando generar mayores costos al sector agropecuario y agroindustrial".
En un comunicado, la entidad remarca que "el país necesita que este conflicto se solucione, ya que el grave conflicto gremial que llevan adelante los trabajadores aceiteros excede en sus consecuencias a las partes directamente involucradas impactando negativamente a toda la cadena comercial, que incluye además a proveedores de insumos, productores de soja y a la economía del país en su conjunto".
"La medida de fuerza que lleva más de 24 días de cumplimiento imposibilita la comercialización del principal producto generador de divisas del país, rompiendo la existencia de un mercado fluido y líquido, retrasando los pagos en momentos del año donde los productores deben afrontar la mayoría de sus compromisos para cerrar la campaña", destacó CRA.