Los puentes de la rotonda que conecta Guaymallén con Ciudad, cruzando el zanjón Cacique Guaymallén a la altura de calle Alem es transitada por miles de vehículos a diario.
Entre ellos, además de autos y camionetas particulares, hay varias líneas de micros -incluso de media distancia-, troles y taxis.
Se trata de un cruce estratégico si se tiene en cuenta que es la principal vía de ingreso a la Ciudad de Mendoza, tanto para aquellos que salen de la Terminal como para quienes vienen por Bandera de los Andes. De hecho, muchos automovilistas que vienen por la Costanera también eligen ese camino.
Desde hace ya varios días, el tránsito se torna caótico por momentos para quienes toman ese puente. Es que la rotura de una losa en la calzada del brazo que tiene circulación de este a oeste ha llevado a que se reduzca a un sólo carril y esto origina desde embotellamientos hasta insoportables conciertos de bocinazos.
"De 15 autos que pasan, uno frena de golpe o incluso toca los tachos que han puesto para señalizar. Bah, es un decir, porque no señaliza nada", improvisó un cálculo Gonzalo, quien durante la mañana de ayer se encontraba recolectando dinero de los automovilistas solitarios en los semáforos de esa esquina de Costanera.
"Paso todos los días, voy y vengo seguido con el taxi a la terminal. Y la verdad es que es una vergüenza. En las horas pico hay que armarse de paciencia para poder pasar", se explayó a su turno Pablo, un taxista mendocino.
Desde la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) en tanto confirmaron que en menos de una semana estará habilitado nuevamente ese tramo.
Problemas
Dos tachos metálicos (algo que está prohibido por una flamante ley) son parte del símil vallado de este agujero ubicado sobre el puente. Y el cerco es completado por un cartel anaranjado donde se lee "Desvío" -está tumbado contra el piso-, algunas tablas de madera y un nylon negro que cubre el bache.
Un segundo cartel donde se lee "Precaución obra", algo de ripio y arena que se mezclan basura acumulada completan el desprolijo collage.
"Es una trampa mortal. El otro día mi mujer tocó uno de los tachos con el auto y si uno dobla muy abierto puede pasar cualquier cosa. No está bien señalizado", contó Fernando García mientras aguardaba el verde del semáforo cerca del mediodía de ayer.
Con solo pararse unos minutos en ese cruce, resulta llamativo ver la gran cantidad de maniobras bruscas que hacen los automovilistas para esquivar este obstáculo. Y si el avistaje se hace en horas del mediodía o cuando empieza a caer la noche, a este lío se le suma un sinfín de bocinazos.
"Si se demoran en arreglarlo, al menos tendrían que tenerlo bien señalizado", contó por su parte Susana, otra conductora.
Desde la DPV destacaron que se trata de un agujero producido por la rotura de una losa y que se ha ido expandiendo. De hecho, indicaron que toda la carpeta asfáltica en ese tramo está deteriorada y que a largo plazo la idea es revisar y recuperar toda la estructura.
No obstante, en lo que se refiere a corto plazo, resaltaron que ya se ha reparado el sector y están aguardando que el material fragüe.
Por otro lado, indicaron que ya han comenzado con obras en la ruta Panamericana para brindar mayores medidas de seguridad no sólo a los automovilistas, sino también a corredores, ciclistas y peatones que los fines de semana salen a aprovechar este espacio.
Según especificaron desde el organismo provincial, ya han colocado cartelería, tachas en la mitad de ambos carriles y van a mejorar la demarcación.
Anunciaron que renovarán la luminaria y que colocarán dos semáforos: uno a la altura de la cancha de Chacras de Coria y otro en la nueva estación de servicio sobre esa ruta.