Tragedia en Río Negro: murió una familia que volvía de vacaciones

Un matrimonio y un hijo perdieron la vida en la ruta nacional 151 tras chocar su auto contra otro vehículo, cuyo conductor falleció.

Tragedia en Río Negro: murió una familia que volvía de vacaciones
Tragedia en Río Negro: murió una familia que volvía de vacaciones

Las vacaciones de una familia mendocina terminaron en tragedia luego de que el auto en el que viajaban chocara frontalmente contra otro vehículo en Río Negro. El siniestro terminó con sus vidas y con la del conductor del otro rodado involucrado.

El hecho generó conmoción en la provincia patagónica -la noticia incluso se replicó a nivel nacional- y en Las Heras, adonde se dirigían tras de las víctimas fatales.

El accidente ocurrió minutos antes de las 21 del último martes sobre el kilómetro 75 de la ruta nacional 151, a unos 60 kilómetros de la ciudad de Catriel. En lo que va del año en esa ruta ya se han registrado ocho muertes por siniestros viales, según detalló la prensa rionegrina.

Marcelo Montenegro (35) conducía un Chevrolet Prisma de color negro. Viajaba acompañado de su esposa, Macarena Cannizzaro (31) -con quien había contraído matrimonio en marzo del año pasado- y de su hijo, Ezequiel Montenegro (16). En sentido contrario y al mando de un Ford Focus de color gris circulaba Jorge Gómez Sotelo, un hombre de 37 años de nacionalidad paraguaya que regresaba de trabajar en una obra en Catriel y viajaba hacia su casa en la capital neuquina.

El accidente se produjo en una zona de recta pero que presenta ondulaciones y algunos pozos. Según informó la Policía de esa provincia a Diario de Río Negro, "no es el peor tramo", que empieza luego de atravesar los primeros 100 kilómetros, pero "el estado general de esta vía es predominantemente malo".

Las primeras pericias permiten abonar la hipótesis de que el conductor del Focus intentó sobrepasar a otro vehículo y se encontró de frente con el rodado en el que viajaban los mendocinos. Ambos vehículos quedaron en la misma banquina. El impacto fue de tal violencia que los cuatro ocupantes de ambos rodados murieron en el lugar y sus restos quedaron entre los hierros de los destrozados automóviles.

Los médicos que llegaron luego en ambulancias no pudieron hacer más que constatar las defunciones. Policías y bomberos se sumaron a las tareas de rescate de los cadáveres.

Fuentes extraoficiales revelaron a medios de prensa locales que el velocímetro del Focus "quedó clavado en 190 kilómetros por hora", por lo que la hipótesis principal apunta a un "adelantamiento imprudente" a gran velocidad, pero también se especula que el conductor pudo haberse quedado dormido.

Los investigadores tendrán que basarse en las pericias mecánicas porque, según consignó Diario de Río Negro, quienes pasaban ocasionalmente por allí y brindaron la primera asistencia a los accidentados, abandonaron el lugar cuando llegó la Policía. "Podríamos haber rescatado más información sobre la mecánica del choque; es lamentable la actitud", comentaron molestas fuentes policiales.

Tardaron 12 horas en identificar a las víctimas

El estado en que quedaron los autos siniestrados y las víctimas en el interior llevó a los pesquisas a demorar más de 12 horas en identificarlos. Luego se supo que los tres ocupantes del Prisma eran mendocinos. 

En la escena la Policía no había encontrado documentación para acreditar la identidad ni el origen de los fallecidos pero finalmente pudieron revelarlas.

Cannizzaro se presentaba como docente en su perfil de Facebook y su esposo indicaba en la misma red social que era oriundo de Caleta Olivia, Santa Cruz. Ezequiel era hijo del hombre, según acreditó la prensa rionegrina.

Volvían de Bariloche, donde habían pasado sus vacaciones y viajaban a Las Heras, donde el matrimonio vivía.

Respecto del embarazo de Cannizzaro, hay versiones contradictorias. Algunos medios indicaron que, efectivamente, cursaba un embarazo mientras que fuentes cercanas a la investigación en Catriel aclararon que "se generó confusión y se habló de un embarazo pero tras las pericias concluyeron que no había gestación", de acuerdo a lo publicado en Diario de Río Negro.

En el Prisma en que viajaban los mendocinos se hallaron toallas y regalos para un recién nacido y por eso se habría especulado con esa situación, algo que fue descartado más tarde.

Los cuerpos fueron trasladados a General Roca, otra ciudad rionegrina, para practicarles la autopsia.

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