Al menos 717 personas murieron y otras 805 resultaron heridas este jueves en una estampida cerca de La Meca, durante un ritual de la peregrinación musulmana anual, según un nuevo balance de la defensa civil saudí.
"El número de muertos subió a 717 y el de heridos a 805", afirmó defensa civil en Twitter, al actualizar el balance de una de las peores catástrofes del hach de los últimos años.
Defensa Civil explicó que la cifra de muertos no es definitiva y añadió que las víctimas son de "distintas nacionalidades", aunque todavía no brindó más precisiones, consignó la agencia EFE. Asimismo, explicó que sus equipos están separando las aglomeraciones de personas y dirigiéndolos por caminos alternativos, y que unas 4.000 personas están participando en la operación de rescate con más de 200 ambulancias y otros vehículos.
La tragedia sucedió cuando los fieles se dirigían desde sus campamentos al lugar en el que debían cumplir hoy con el rito de la lapidación de las tres columnas que simbolizan las tentaciones del diablo, durante el tercer día de la peregrinación. Los caminantes habían regresado desde la zona cercana de Muzdalifa donde pasaron la noche y recogieron los guijarros que lanzarán a los pilares de Satanás. Esta mañana efectuaron el rezo comunitario que marca el comienzo del "Al Aid al Adha", o Fiesta del Sacrifico.
Con este ritual, los musulmanes recuerdan el sacrificio de Ibrahim (Abraham), quien por amor a Alá (Dios) ofreció, según la tradición musulmana, la vida de su hijo primogénito Ismael. La avalancha se hoy se produjo después de que el pasado día 11 al menos 107 fieles murieron y 238 resultaron heridos al caer una grúa en el interior de la Gran Mezquita de La Meca, donde finalizan los ritos de la peregrinación.
La peregrinación a La Meca es uno de los cinco pilares del islam, junto a la "shahada" (profesión de fe), la limosna, la oración y el ayuno en el mes de Ramadán.