El defensor de Chapecoense de 27 años, Alan Ruschel, se recupera favorablemente. Tras la operación de una vértebra fracturada, comenzó a mostrar signos positivos: no depende ya de un respirador, está consciente y puede comunicarse con sus familiares y come sin ayuda de una sonda.
El primer sobreviviente rescatado del accidente aéreo de Chapecoense despertó hace dos días. Pero cuando abrió los ojos no recordó nada, ni sabía que la mayoría de sus compañeros estaban muertos. Pidió salir del hospital pronto.
Sin embargo, se procedió a contarle de a poco lo que había sucedido y con ayuda de un psicólogo le completaron la información relacionada a la tragedia aérea.
Su hermana posteó por Instagram cada detalle de la evolución de su hijo con el usuario @axi_ruschel:
"En el nombre de Jesús, Alan está progresando cada minuto más. Lo que sucedió fue algo milagroso. Ayer, el psicólogo le contó todo lo que había sucedido. Alan sólo dice que quiere regresar, que quiere salir de ahí. Y sabe que todo fue un milagro de Dios. Mi padre me contó que esa noche estaba muy agitado, preocupado. Le pidieron que se quedara tranquilo, que así volverá a nuestra casa tan pronto como sea posible. Pero Dios es bueno. No tenemos ninguna estimación de cuándo va a salir. Gracias por la cadena de oraciones y por los pensamientos positivos. Sé que Dios está abrazando y consolando al corazón de cada familia que perdió a su padre, hijo, hermano, esposo y amigo. No vamos a dejar de orar".
En una segunda publicación, la hermana relató: "En el nombre de Jesús, Alan está progresando cada minuto más. Lo que sucedió fue algo milagroso. Ayer, el psicólogo le contó todo lo que había sucedido. Alan sólo dice que quiere regresar, que quiere salir de ahí. Y sabe que todo fue un milagro de Dios. Mi padre me contó que esa noche estaba muy agitado, preocupado. Le pidieron que se quedara tranquilo, que así volverá a nuestra casa tan pronto como sea posible. Pero Dios es bueno. No tenemos ninguna estimación de cuándo va a salir. Gracias por la cadena de oraciones y por los pensamientos positivos. Sé que Dios está abrazando y consolando al corazón de cada familia que perdió a su padre, hijo, hermano, esposo y amigo. No vamos a dejar de orar".