La Justicia condenó este martes al chofer del micro de Meltur a 14 años de cárcel por ser considerado resposable del fatal choque ocurrido en Las Cuevas en febrero de este año y en el que murieron 3 niños chilenos jugadores de la escuela Colo Colo Lo Boza.
Un accidente de colectivo en Alta Montaña conmocionó la madrugada mendocina del pasado viernes dos de febrero. Cerca de las 3.30, un micro de la empresa chilena Meltur desbarrancó en Las Cuevas y fallecieron tres chicos. Además, hubo 20 heridos, uno de ellos grave internado en el Notti. En el ómnibus viajaba una delegación de niños deportistas de la escuela Colo Colo Lo Boza que iban a jugar al fútbol a la República de Paraguay.
Esta mañana, la Justicia condenó al chofer del micro, Leonel Quiroga Morales, a 14 años de cárcel por ser considerado responsable del fatal choque ocurrido en la alta montaña.
"Condenar a Leonel Rodrigo Quiroga Morales a la pena de catorce años de prision con más la inhabilitacion absoluta por igual termino y pago de costas como autor culpable y responsable del delito de homicidio simple- tres hechos-, lesiones graves dolosas - siete hechos, y lesiones leves dolosas- veintidos hechos", dice textual la sentencia firmada por los jueces Alejandro Miguel, Ramiro Salinas y Marcelo Gutierrez del Barrio.
Desde el momento del accidente, Quiroga quedó detenido en la penitenciaría de Mendoza.
Un mes después de la tragedia fue noticia nuevamente por asegurar ante las cámaras de la televisión chilena que había consumido cocaína 4 días antes del fatídico vuelco.
“Me junto con gente que fuma marihuana, es lo que tengo en el cuerpo”, aseguró ante las cámaras, a lo que le siguió su confesión con respecto a la segunda sustancia.
"Probé cocaína cuatro días antes del accidente cuando llegué de Brasil, pero de ahí nunca más", afirmó.
Con respecto a la mecánica del accidente, el hombre dijo que tuvo que realizar una maniobra brusca para evitar más muertes. “El camión se me frena y yo acelero para pasarlo en recta y cuando voy a pescar la curva ahí aparece el otro bus”, relató el chofer.
Según su visión, no tuvo otro opción ya que no podía frenar repentinamente manejando un colectivo de más de 3.000 toneladas.
“No es lo mismo que ponerle un freno a un auto”, aclaró. Asimismo agregó que perdió el control del vehículo cuando el otro colectivo que venía de frente le pegó en la parte trasera.