Muy disconforme había quedado Marcelo Gallardo por el funcionamiento de River ante Quilmes.”Fue uno de los peores partidos desde que estoy como DT”, había confesado el DT de River.
Por eso, se sabía que esta semana, sin competencia por Copa, iba a ser larga e intensa. Con muchos trabajos. Y así lo fue en el arranque del martes. En la tarde de ayer, el Muñeco hizo hincapié en ejercicios con pelota en espacios reducidos, más tareas de defensa-ataque.
Es que quiere que su equipo vuelva a estar fino con el balón. Preciso y dinámico, algo que no ocurrió contra el Cervecero durante el pasado domingo en el Monumental (finalizó 2-2).
Una de las cosas que destacó a River durante el semestre pasado fue su solidez defensiva. Un mérito que tenía el equipo de Gallardo, al que le convertían muy poco. Apenas 18 goles en 32 partidos, contando los 19 del torneo, los tres de Copa Argentina y los diez de Sudamericana.
Era complicado vencer la valla custodiada por Marcelo Barovero. Sin embargo, en este 2015, ha perdido esa consistencia y lo viene padeciendo. Preocupación, desde luego.
El Millonario repitió los vicios mostrados en el verano -el 0-5 ante Boca, cabal ejemplo de esa endeblez- y ante Quilmes lo pagó con dos goles.
Muchos problemas a la hora de retroceder, desprotección por las bandas, más distracciones y fallas puntuales a nivel individual. La no presión a Buonannote en su definición y el remate en solitario de Chirola Romero fueron los dolores de cabeza sufridos en el partido jugado en el Monumental.
No se sabe aún el once que colocará en Córdoba ante Belgrano el próximo domingo por la competencia doméstica. Encima, cuatro días más tarde jugará por la Libertadores ante Tigres de México.
Lo que sí, pensando en una futura rotación, el entrenador ensayó salidas desde el fondo con una novedosa defensa: Mayada, Mammana, Balanta, Urribarri y Guido Rodríguez de cinco. Luego, Ponzio, Solari y el pibe Vega. ¿Será algo de lo que se verá frente al Tatengue, ya que River afrontará una seguidilla intensa durante las próximas semanas? Por ahora el Muñe juega al misterio.
