Una jubilada japonesa y un vecino fueron torturados, asesinados y calcinados en una casa de la ciudad bonaerense de Florencio Varela, donde se investigaba un presunto intento de robo, informaron hoy fuentes policiales.
El hecho fue descubierto ayer por un herrero que tiene un local al lado de la vivienda donde ocurrió el doble crimen, quien vio que estaba la puerta abierta y avisó al 911.
Al entrar la Policía al inmueble de la calle Cariboni al 2100, halló los cadáveres de Yoshiko Kumakura, de 73 años, y de Martín Quiroga, de 48, en un dormitorio.
Según las fuentes, ambos tenían signos de torturas y habían sido quemados, aunque la combustión de los cuerpos no fue total, aparentemente por la falta de oxígeno en el ambiente.
El caso es investigado por el fiscal Darío Provisionato, quien por ahora apuntaba a la hipótesis de un robo.
Kumakura vivía en esa propiedad con su marido, también japonés, de 78 años, quien había viajado al país asiático para tratarse por un problema de salud y para visitar a sus tres hijos.
En tanto, Quiroga era un vecino del barrio que ayudaba a la mujer con distintas tareas y le cobraba la jubilación del esposo.
Según los investigadores, en la planta alta de la casa era común que se realizaran ritos budistas, por lo que no se descarta que el o los asesinos hayan creído que allí había dinero.