Tony Bennett realmente encaja este año en una categoría distinta a la que ha sido nominado el último cuarto de siglo en los Grammy.
El cantante de 89 años compite nuevamente por el gramófono dorado al mejor álbum de pop vocal tradicional, por “The Silver Lining: The Songs of Jerome Kern'', junto con Barry Manilow, Josh Groban, Seth MacFarlane y, sorpresivamente, Bob Dylan.
Es un premio que Bennett ha ganado 12 veces desde que la categoría se estableció en 1992, incluyendo el año pasado por “Cheek to Cheek”, su álbum de duetos con Lady Gaga. Pero a diferencia de sus discos de duetos con Gaga y otras estrellas pop contemporáneas, “Silver Lining” es una colaboración sublime e íntima con el pianista Bill Charlap.
“Creo que debería ser un álbum de jazz por Bill Charlap, que es un gran pianista de jazz. Esa es la razón por la que hice este álbum”, dijo Bennett en una entrevista reciente en su estudio de arte con vista a Central Park. “Sencillamente no puedo creer lo mucho que él entiende de piano, sabe cuándo parar, cuándo seguir de largo y cuándo mantener las cosas muy simples”.
Charlap, hijo del compositor de Broadway Moose Charlap (''Peter Pan'') y la cantante pop Sandy Stewart, comparte la devoción de Bennett por el gran cancionero estadounidense. Decidieron hacer un álbum tipo cancionero en honor a Jerome Kern, que según Bennett inspiró a George Gershwin y a todos los otros grandes compositores estadounidenses que vinieron después de él.
“Kern es el ángel al tope del árbol de los compositores de música popular”, dijo Charlap en una entrevista telefónica. “Tiene un pie en Europa y otro pie en América”.
El disco incluye la balada de 1914 “They Didn't Believe Me”, que Bennett dijo que “todavía suena como una canción nuevecita”. También está “Make Believe” del musical de Kern y Oscar Hammerstein II de 1927 “Show Boat”, cuyo tema sobre prejuicios raciales transformó el teatro musical estadounidense.
Los tres duetos de piano y voz, que incluyen “The Way You Look Tonight” y “All the Things You Are”, evocan dos discos clásicos de Bennett de los años 70 con el introspectivo pianista de jazz Bill Evans. Charlap y su esposa, la también pianista Renee Rosnes, tocan juntos en cuatro canciones, entre ellas la emotiva “The Last Time I Saw Paris”, escrita por Kern en 1940 luego que los nazis invadieron Francia.
La mitad de los 14 cortes cuentan con los compañeros del trío de Charlap: el bajista Peter Washington y el baterista Kenny Washington.
Charlap dijo que Bennett comparte la calidad de los grandes intérpretes de jazz porque no canta por encima del acompañamiento sino que se vuelve parte de la banda.
“A nivel expresivo, Tony se ha vuelto más y más profundo con los años. ... Su canto denota sabiduría y experiencia de la manera más hermosa y al mismo tiempo es muy poderoso”.
Bennett dice que no sabe cómo definirse a sí mismo. “Todo lo que trato de hacer cuando canto es hacer a la gente feliz'', expresó.
“Soy muy afortunado porque aquí estoy, a punto de cumplir 90 años y mi voz está en plena forma. ... Tengo lo que llamo una vida bendecida. Hago lo que me encanta y jamás me retiraré. Hasta el día que me muera voy a cantar y pintar y tratar de ser cada vez mejor”.