Toni Collette: las luces del sexo y las sombras del horror

La actriz protagoniza dos producciones notables de 2018: la serie “Wanderlust” y el filme de terror “Hereditary", que se volvió de culto.

Toni Collette: las luces del sexo y las sombras del horror
Toni Collette: las luces del sexo y las sombras del horror

Quedará en el lector opinar si "Hereditary" hace mérito a las buenas críticas que ha tenido. Mirarla en estos días coincidiría con una doble oportunidad: pasar Halloween haciendo caso a los especialistas del cine de terror que la han señalado como la mejor película en su clase del año, y sorprenderse una vez más con una actuación de Toni Collette, especialista en interpretar madres ("Pequeña Miss Sunshine", "Sexto sentido"), aunque aquí toda la película es de ella.

Este filme, del semidebutante cineasta Ari Aster, puede dividir las aguas de las opiniones, aunque es difícil de olvidar realmente.

La trama es sencilla: una mujer (Toni Collette) sufre la muerte reciente de su madre, un hecho que saca a la luz las fisuras de su psicología. Su relación con su esposo, su hija preadolescente y su joven hijo se irá tornando cada vez más difícil, por el duelo y por los secretos que poco a poco van saliendo a la luz a raíz de esa muerte.

Los secretos son revelados, cruelmente, por el título con el que se dio a conocer esta película en las salas mendocinas, en junio: "El legado del Diablo"; sepultándola, así, en lo más bajo del cine de terror chatarra.

El argumento le da posibilidad al director de desplazarse libremente en los géneros, transformando el filme en algo híbrido. Algunos destacan sus facciones de drama familiar, apuntalado con terror psicológico, que puede por momentos recordar a Bergman, aunque con elementos sobrenaturales que le deben mucho a Argento, hasta "degenerar" en algunas imágenes gore bastante explícitas (aunque no gratuitas).

Usa con esmero toda su herencia: el detalle inquietante (Roman Polanski), el cuerpo contorsionado (William Friedkin) e incluso la ambigüedad de la vigilia (Darren Aronofsky), porque ciertamente "Hereditary" es hija de muchos clásicos del género ("El bebé de Rosemary" es su precedente más obvio).

Tampoco es una historia nueva. Al contrario: existen muchas variaciones del linaje maldito, aunque el mérito de Aster está en haberla armado con mano de autor. Su firma está en el delicado diseño de producción y el sorprendente diseño de sonido (no volveremos a escuchar un chasquido de lengua sin estremecernos), en las actuaciones, en los tributos, en los intertextos y, sobre todo, en su habilidad para descubrir efectos. Efectos acertados, decíamos, no efectistas.

Porque esta película no reniega de las mutilaciones y de la sangre, sino que las llena de contenido, rescatándolas de la vulgaridad del cine de terror promedio. Comprende lo básico: basta una sola imagen para el knock out.  

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA