Era uno de los galanes de Hollywood hasta que conoció el bótox. Es que Tom Cruise intentó borrar el paso del tiempo y fue a un cirujano plástico quien parece haberlo inflado como un globo. Su cara, víctima del bótox, se ve redonda y rellena. Tanto que podría ser otro si no se lo mira con atención.
Así llegó el galán a los premios Bafta y sorprendió al mundo con su cambio. Se retocó los pómulos, la frente y algo de los ojos. En fin, todo lo que pudo para lucir como un adolescente. ¡Hasta perdió los pocitos que se le formaban cuando sonreía!
Su cara quedó tal como la muestran las fotos. A lo René Zellewager...
Así era:
Así es: