Donde hubo fuego, cenizas quedan, dice aquel célebre refrán. Uno que Nicole Neumann parece reformular al estilo de: "si hubo un incendio, lo voy a apagar y soplar a cada rato para que no dejen de arder las brasas".
Y, sí: desde que se separó del futbolista Fabián Poroto Cubero, la rubia modelo no para de arrojarle dardos evenenados, cuando no bombas radiactivas a su ex marido. El jugador de Vélez Sárfsfield, quien hasta su romance y casamiento con Nicole no salía de las páginas de las secciones deportivas, tampoco le quita nafta al fuego. A Cubero y a Nicole no los une sólo una relación acabada, sino tres hijas: Indiana (9 años), Allegra (7) y Sienna (3), y a la modelo le molestó últimamente que su padre las paseara por diversos medios y las mostrara. ¡¿Para qué?!
En la última edición de la revista Gente, Nicole ocupa la portada y no sólo con su siempre escultural figura, sino con un gesto elocuente si se lo relaciona con el momento que vive con su ex: aparece con el dedo sobre los labios, como pidiendo silencio, pero en lugar de usar el dedo índice, utiliza el medio. O sea, combina el "callate" con el "fuck you" (se suaviza al ponerlo en inglés, en español podríamos llevarlo a un "andá a c…"). Para más inri, el título en grandes caracteres parece dirigido al defensor de Vélez:
"Quiero un hombre que lleve los pantalones más puestos que yo". En la nota, a Nicole no se le escapa dejar en claro su furia contra Cubero: "Veo situaciones muy mal manejadas de su intimidad, como revelar diálogos o contar con quién pidieron dormir. Si no están conmigo, no puedo controlar qué escuchan, qué leen, y eso me pone mal".
A las situaciones que se refiere quizá sean, por ejemplo, que Cubero no se ha cuidado de ocultar su romance actual con Mica Viciconte, una chica también dada a las declaraciones públicas explosivas, y quien, en una entrevista televisiva en la que le propusieron un juego para que eligiera "a quién matar" entre Pampita, Flor Vigna y Nicole, no tuvo empacho en elegir a la última. ¡Qué dulces, las chicas!
