"Yaqui Vargas... esa, la que vende cocaína en el Campo Papa, cambió de número, anda con el teléfono...".
Con ese llamado anónimo, realizado al Fonodroga, el 24 de setiembre de 2013, la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico comenzó a ponerle nombre, apellido y alias, a una investigación que, según la Justicia, le permitió "desarticular gradualmente" a una organización que estaba orientada a la comisión de delitos en infracción a la Ley 23.737 y al blanqueo de activos derivados de aquella actividad ilícita.
En fecha próxima (los primeros meses de este año), antes de que se cumplan los 2 años de su detención (ocurrida en San Luis, el 14 de marzo de 2014 ) en los Tribunales Federales de Mendoza, se abrirán las puertas al juicio que tiene como imputada principal a Sandra Jaquelina Vargas Méndez, conocida como "Yaqui", nacida en Mendoza el 18 de agosto de 1976, viuda, quien además estará acompañada en el banco de los acusados por Nora Gatto Godetti, de 64 años; Silvana Vargas Méndez (32) y Romina Vargas Méndez (27); Patricia Vargas Méndez (43); Jonathan Daniel Brizuela Vargas (31); Silvina Gelvez Vargas (32) y Carlos Vargas (34).
Así el Tribunal Oral Federal 2, integrado por Waldo Piña, Fátima Ruiz López (Capital Federal) y Gretel Diamante (San Luis), comenzará a debatir uno de los casos más destacados de la lucha contra el narcotráfico, comparable con el famoso "Carrusel Blanco" que tuvo a más de 20 imputados y que, por su complejidad, se realizó en la sala del Poder Judicial mendocino hace unos años atrás.
Además este debate tendrá otro condimento: la Unidad de Información Financiera estará presente como querellante por la Provincia.
El principio
De acuerdo con la instrucción del expediente, que a la fecha suma varios cuerpos, la Policía de Mendoza tenía conocimiento de esta actividad por parte de "Yaqui" y algunos de sus familiares desde hace tiempo, después de haber recibido "numerosas denuncias en contra de la misma persona".
Desde ese momento, en los albores del año 2011, se inició una investigación que permitió "tener por acreditado", a través de las intervenciones telefónicas y de informes que daban cuenta del patrimonio de los acusados, que "integraban una banda delictiva organizada y liderada" por Sandra Jaquelina Vargas (a) “Yaqui”, para la comercialización de manera sostenida y sistemática de marihuana y cocaína en las zonas del barrio Campo Papa, con puestos de distribución en el barrio Granja Lomas de Chacras, barrio Los Toneles y un cuarto ubicado sobre calle Salvador Arias y Chuquisaca, oportunidad en que se aclara que "esta actividad comercial de las sustancias se prolongó hasta la efectiva detención de los encausados".
Entre los elementos secuestrados y que fueron incorporados a la causa figura el secuestro de 1 kilo de marihuana en un "ladrillo" y 165 "porros". Más adelante se le encontraron 14 kilos de marihuana y 840 gramos de cocaína, distribuidos en distintos paquetes, oportunidad en que también se le secuestró dos balanzas digitales con restos de droga y 40 librillos de seda. Por este procedimiento terminó siendo condenado Miguel Angel Valdivia a la pena de 4 años y 9 meses de prisión.
La continuidad de los secuestros se dio en una Ford Eco Sport (ENS 509), vehículo del que Yaqui tenía una autorización para conducir y donde se encontraron 124 kilos de marihuana, distribuidos en 164 "ladrillos". La causa terminó con la condena a Alfredo Vargas y Orlando Becerra (5 años y 3 meses de prisión).
Finalmente, en la investigación por el asesinato de Cristian Gelvez (esposo de “Yaqui”) se concretó otro allanamiento, en este caso en una propiedad del barrio Granja Lomas de Chacra, donde se secuestró 1 kilo de marihuana.
Activos
Paralelamente se pudo establecer que "los imputados tenían bienes muebles e inmuebles a su nombre, los que habían sido adquiridos para disimular el origen de las ganancias obtenidas del comercio de estupefacientes".
Así fue que entre los años 2010 y marzo de 2012 el grupo había adquirido varios vehículos, algunos de alta gama, y una decena de motos. También se comprobó la compra de propiedades en Luján de Cuyo, Godoy Cruz y en la provincia de San Luis, donde "Yaqui" terminó siendo detenida sin oponer resistencia.
Denuncias, escuchas telefónicas, testigos, serán los elementos que cada parte aportará al debate, en busca de esclarecer los hechos y sus culpables.
Lavado de dinero
Según se busca demostrar, “Yaqui” y su entorno pusieron en "circulación en el mercado formal bienes y ganancias provenientes de la venta de estupefacientes". Así fue que compraron una Mercedes Benz Sprinter (DRU 420), dos camionetas Toyota Hilux (MNP 177 y MZE 408), una VW Amarok (JGU 418), un VW Fox (GRP 828) y un Chevrolet Corsa (FUR 993).
Además adquirieron 10 motocicletas marcas Zanella 125, Guerrero 70, Honda 125, Motomel 250, Maverick, Kawasaki Ninja y un cuatriciclo Mondial, entre otros.
El listado se completa con propiedades compradas en Mendoza, principalmente en zonas de Luján de Cuyo y Godoy Cruz, y también en la residencial Cuchi Corral, de la localidad puntana de Juana Koslay.
Las penas
La ley 23.737, habla de tenencia y tráfico de estupefacientes y en su artículo 7. señala que "Será reprimido con reclusión o prisión de ocho a veinte años..., el que organice o financie cualquiera de las actividades ilícitas a que se refieren los artículos 5 y 6 precedentes”.
Mientras que el artículo 5, hace referencia a que “será reprimido con reclusión o prisión de cuatro a quince años... el que sin autorización o con destino ilegítimo, comercie con estupefacientes o materias primas para su producción o fabricación o los tenga con fines de comercialización, o los distribuya, o dé en pago, o almacene o transporte”.
