Por los festejos vendimiales, y al igual que el resto de los equipos mendocinos, Gimnasia y Esgrima no jugó el fin de semana pero festejó igual. Los resultados pusieron al blanquinegro muy cerca del pentagonal final por el primer ascenso a la B Nacional.
Para no depender de nadie, el equipo de Fuentes necesita sacar cuatro puntos de los nueve que tiene en juego. Y si tenemos en cuenta que dos de los tres partidos que le quedan son en condición de local, las posibilidades se agigantan.
¿Por qué sólo cuatro puntos? Porque así se asegurará llegar a 14 unidades, una cantidad de puntos que los posibles terceros de la otra zona no pueden alcanzar ya que todos tienen 7 puntos y seis en juego. Es decir el máximo posible será 13.
Ganando mañana contra Estudiantes de Río Cuarto, el blanquinegro, además, se pondrá como líder de la zona, lo que le permitiría definir un eventual ascenso en casa.
El que complicó su situación es Juventud Unida Universitario de San Luis que, al perder con Alvarado, quedó a sólo tres puntos arriba de los marplatenses que ahora están en carrera por el tercer lugar.
Los puntanos son quienes tienen el fixture más complicado porque deberán visitar a Estudiantes de Río Cuarto y esperar por el Lobo, los dos equipos que parecen ser los grandes candidatos a estar en la etapa final.
Gimnasia, que continúa invicto en el torneo con 22 partidos jugados, acumula también once meses sin perder en su estadio, la más larga racha de su historia.
Con esos antecedentes arranca esta nueva etapa. Todo parece estar a pedir del Lobo.
Ayer, el plantel tuvo un día de relajación en la piscina del Club Banco de Mendoza.
