Los policías y la pasajera de un vehículo perdieron la vida en un tiroteo en Lieja (este de Bélgica), así como el atacante, unos hechos que, según la justicia belga, podrían apuntar a un atentado terrorismo.
"Violencia cobarde y ciega en Lieja. Todo nuestro apoyo a las víctimas y sus familias", tuiteó el primer ministro belga, Charles Michel, asegurando que supervisan "la situación con los servicios de seguridad y el centro de crisis".
El tiroteo se produjo hacia las 10.30 en el bulevar de Avroy, una gran arteria del centro de esta ciudad de 200.000 habitantes.
El autor se refugió en un instituto, tras el tiroteo ocurrido en la calle. A continuación, se habría producido una breve toma de rehenes, según fuentes oficiles.
Según medios locales, el autor habría gritado "Allahu Akbar" (Alá es grande). Preguntada por esta información, Collignon dijo que no sabían nada por el momento.
La fiscalía federal belga, encargada de los casos de terrorismo, asumió la investigación, "ya que existen elementos que van en la dirección de un atentado terrorista", dijo su portavoz, Eric Van Der Sypt.
Los policías y militares han sido objeto desde 2016 de varias agresiones en Bélgica, donde la organización yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó un atentado en marzo de 2016, que dejó 32 muertos en el metro y aeropuerto de Bruselas.
El gobernador de la provincia de Lieja, Hervé Jamar, confirmó que "ningún alumno resultó herido" en "la toma de rehén en el instituto de Waha". "El individuo fue neutralizado", agregó en Twitter.
El atacante, conocido por delitos comunes pero no por radicalismo, había salido la víspera de la prisión de Lantin, cerca de Lieja, según los medios belgas.
Además del atacante, dos policías perdieron la vida y también la pasajera de un vehículo que circulaba en el barrio, indicó Catherine Collignon, portavoz de la fiscalía de Lieja. Otros dos policías resultaron heridos.