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Si bien la calidad de la comida y el servicio en un restaurante siempre deberían ser los factores más importantes en el funcionamiento de un restaurante, una razón grande por la que muchos restaurantes se visitan es para los clientes la experiencia de comer.
Un restaurante bien decorado que habla del tipo de cocina y la atmósfera debida puede marcar la diferencia para determinar si un cliente va a volver al mismo restaurante. Independientemente de tu presupuesto o necesidades de diseño, la decoración de tu restó. debe ser una preocupación.
PASOS A SEGUIR
Desarrollá un tema para la decoración de tu restaurante, sobre la base de su cocina. Si su cocina es mexicana, es probable que desees que cuenten con elementos de diseño mexicano, tales como colores cálidos y saturados, de madera rústica y diseños de mosaico. El estilo de tu restó también entra en juego.
Pintá las paredes con elementos relacionados con la temática para añadir interés a las diferentes secciones del restaurante. Una capa de pintura puede marcar la diferencia en mejorar visualmente el espacio. Combinado con acentos decorativos, tales como tratamientos de las ventanas, estilos del piso y la iluminación, la pintura que elijas puede ayudar a crear las bases para el diseño de tu restaurante.
Amueblá tu restaurante con muebles adecuados con el nivel de formalidad, así como el estilo. Por ejemplo, si tu restó es informal, las cabinas de vinilo y mesas de madera son estándar. Si tu restaurante es más formal, optá por mesas y sillas de mejor acabado.
Utilizá accesorios de iluminación como una oportunidad para establecer el ambiente espacial. Junto con la iluminación de techo en todas partes, luces de techo sobre las mesas, candelabros de pared e incluso centros de vela pueden ser opciones eficaces de iluminación que crean presencia en el espacio.
Tené en cuenta el estilo de mesa como parte de su estética de diseño en general. Hay muchas maneras de dar acento a las mesas, como la pintura, manteles, baldosas y tapas de vidrio con diseños embutidos.
Colgá arte para añadir interés a las paredes.