La cocina es el corazón del hogar y es importante que contenga la mejor energía. No solo pasamos bastante tiempo en este espacio, sino que además es donde preparamos las comidas que darán fortaleza y salud a nuestros cuerpos. Aunque pueden hacerse remodelaciones para que el chi fluya mejor, los cambios pequeños son los que más beneficio tendrán. Sigue estos tips al decorarla:
Iluminación y espacio
La cocina debe ser liviana y fresca. Haz cambios en la iluminación para que nunca esté oscura. Agrega bombillos que irradien luz blanca e instala sistemas de luminotecnia gradual para ambientar el espacio. Otro detalle que debes tener en cuenta es cómo usas el área, pues no debes llenarla de cosas innecesarias. Mientras más limpias y organizadas luzcan las encimeras y repisas, mejor fluirá la energía chi.
Detalles naturales
Los detalles naturales siempre le dan vida a un espacio y en el Feng Shui, también ayudan a esparcir la buena energía. Compra verduras y frutas de estación y déjalas en un bowl en la mesa. Agrega algunas macetas pequeñas con hierbas cerca de la ventana. Si tienes un comedor en este espacio, incluye flores naturales como centro de mesa. Pero recuerda, las flores secas o las frutas pasadas no son buenas en el Feng Shui, asegúrate de quitarlas apenas dejen de verse vivas.
Amarillo
El mejor color para decorar la cocina según este arte milenario es el amarillo, ya que da apetito y ayuda a la digestión. Úsalo en matices pasteles en las paredes o gabinetes. Si prefieres un amarillo vibrante, utilízalo en detalles. Este tono es tendencia, por lo que podrás encontrar muchos adornos para este espacio. Desde platos y fuentes, hasta electrodomésticos pequeños, aprovecha para darle un nuevo look a tu casa. Recuerda también decorar con limones y flores amarillas.
Organización
En cualquier ambiente o para el Feng Shui no hay nada menos positivo que el desorden. En cocinas pequeñas la mejor opción son las repisas abiertas, pero asegúrate de no llenarlas demasiado. Organiza tu alacena para que todo sea fácil de encontrar. Considera usar contenedores transparentes de diferentes tamaños. Tira los ingredientes que ya no necesitas, y mantén el refrigerador limpio. Si no tienes mucho espacio de almacenamiento, guarda platos que no utilizas seguido y otros artículos en otra parte de tu casa.