"El cuaderno de Bento", de John Berger.
Durante su breve existencia, el célebre filósofo Baruch Spinoza, padre de la Ilustración, llevó un cuaderno de apuntes que se perdió tras su muerte.
En “El cuaderno de Bento” (Alfaguara), el pintor, ensayista, activista y novelista John Berger imagina el aspecto que podría haber tenido ese texto: un reflejo de cómo el arte puede orientar la mirada. Un puñado de maravillosos dibujos, relatos iluminadores -como el de la anciana nadadora que tuvo que huir de Camboya-, y profundas reflexiones acerca de las flores, el cuerpo humano, el baile, los supermercados, los bufones de Velázquez y las distintas formas de resistir a la crudeza del mundo.
"El tango de la Guardia Vieja", de Arturo Pérez-Reverte.
“Una pareja de jóvenes apuestos, acuciados por pasiones urgentes como la vida, se mira a los ojos al bailar un tango aún no escrito, en el salón silencioso y desierto de un transatlántico”.
Un extraño desafío entre dos músicos, que lleva a uno de ellos a Buenos Aires en 1928; un asunto de espionaje en la Riviera francesa durante la Guerra Civil española; una inquietante partida de ajedrez en el Sorrento de los años sesenta... “El tango de la Guardia Vieja” narra una turbia y apasionada historia de amor, traiciones e intrigas, que se prolonga durante cuatro décadas.
"Cuentos de Tenis" (varios autores).
Escritores de varias generaciones y nacionalidades (entre ellos Bioy Casares, Guillermo Martínez, John Updike, Foster Wallace) apelando al realismo o a lo fantástico, van develando a través de sus cuentos los modos en que el tenis se puede vincular con las más diversas circunstancias de la vida.
En esta antología temática, once escritores van construyendo un mosaico de universos dispares que se revelan con el pretexto del tenis y que, a la vez, son el pretexto para revelar un juego en el que caben la pasión, la destreza, la venganza, el fracaso y la búsqueda de la felicidad.