Acosado ya por su larga enfermedad, en agosto de 2011, Steve Jobs dejaba el timón de Apple a Tim Cook, hasta entonces, su mano derecha. Esa última decisión fue de lo más acertada. La cotización bursátil de Apple rozaba el viernes los U$S 750.000 millones, cuadriplicando el valor que tenía cuando estaba Jobs.
El coloso del Silicon Valley, además, marca récords de ventas y ganancias sobre todo con su producto estrella -el iPhone-, se apresta a lanzar su reloj inteligente (el Apple Watch) y desarrolla su propio auto eléctrico, entre otras iniciativas.
Los últimos informes de la compañía son asombrosos. Tras incursionar exitosamente en mercados asiáticos con productos de alta gama, Apple alcanzó una facturación de U$S 74.600 millones en el último trimestre, lo que le reportó ganancias por U$S 18.000 millones.
Y todo gracias a los 74,4 millones vendidos de sus nuevos productos insignia: el iPhone 6 y el iPhone 6 Plus. Frente a estas cifras, las ventas de iPad (21,4 millones) y las de la división de computadoras Mac (5,5 millones) parecen un relleno.
El valor de mercado de Apple, rondando tres cuartas pares del billón de dólares, más que duplica las de sus inmediatos perseguidores, según el índice Standar and Poor's 500: la petrolera Exxon Mobil (U$S 377.974 millones), Google (U$S 365.957 millones), el fondo de inversión de Warren Buffet, Berkshire Hathaway (U$S 362.000 millones) y Microsoft (U$S 356.000 millones). Con respecto al notable despegue, Tim Cook consideró que todo el mayor logro es haber incursionado en algunos mercados asiáticos, sobre todo en China, con productos de alta gama.
En los últimos tres meses de 2014, Apple vendió más iPhones que cualquier otra marca. Todo mérito de Cook, porque él personalmente se encargó de trabar una alianza en setiembre pasado con China Mobile, la mayor operadora del país, que cuenta con 760 millones de clientes.
“Esta asociación -dijo Cook- hace que por primera vez podamos posicionar el iPhone a un nivel diferente” en ese país. Apple facturó en el último trimestre en China, Hong Kong y Taiwán un total de U$S 38.000 millones.Y no sólo eso. Apple también amenaza el liderazgo de Samsung en su propia casa: Corea del Sur. Con sus últimos dos modelos de iPhone, la marca se posicionó en el segundo lugar en ese mercado, con un 33% del total, superando a LG (14%), otra de las marcas coreanas, según datos de la consultora Counterpoint Research.
Tom Kang, analista especializado de esa consultora, destacó que hasta este momento "ninguna marca extranjera había logrado superar el 20% del mercado" coreano. En Japón, incluso, Apple predomina claramente con el 51% del market share, por encima de Sony (12%).
Estos éxitos consagratorios, más los proyectos del Apple Watch y el coche eléctrico, proporcionan a la compañía nuevas oportunidades. La tenacidad innovadora, puesta en duda desde el alejamiento de Jobs, no decayó bajo la comandancia de Cook.
Este ingeniero de 53 años, con más de 16 años en Apple (llegó en 1998), tiene largos y brillosos antecedentes en la industria: los memoriosos recuerdan que pasó por Compaq e IBM antes de ingresar a Apple, lugar que lo vio crecer a lo largo de los años hasta posicionarse como el heredero de su cofundador. Jobs, como ya se mencionó antes, dejó el cargo de CEO por el cáncer que finalmente lo mató. Apple valía U$S 153.000 millones en ese entonces. Rápidamente y a pesar de las dudas iniciales, Cook reafirmó sus condiciones de líder, sin contar con las habilidades comunicacionales ni el carisma de Jobs.
En este sentido, su sucesor es mucho más reservado, conciliador y afable en el trato con el personal. En octubre de 2014, Cook sorprendió al hablar públicamente sobre su homosexualidad. “Aunque nunca negué mi sexualidad, no la reconocí públicamente hasta ahora. Así que permítanme ser claro: estoy orgulloso de ser gay, y considero ser gay entre los más grandes regalos que me dio Dios”, admitió en una columna de opinión en la revista Bloomberg BusinessWeek.
A los accionistas y al directorio le importan los números. Y los números que presenta Cook son más que auspiciosos. Por tal motivo, no debería sorprender que Cook haya percibido el año pasado una remuneración de U$S 9,2 millones, más del doble que el año anterior. Esto sin contar con el paquete accionario que Cook posee: Apple le entregará 1 millón de acciones de la compañía como recompensa por su rol de CEO, la mitad en 2016 y la otra mitad en 2021.
Casi como un calco de lo que pasó con el iPad, Apple se esperanza en revitalizar una categoría que nunca logró despegar: los smartwatch. Las principales marcas de la industria, Samsung, LG, Lenovo y Motorola, lanzaron varios modelos de relojes inteligentes, sin el éxito esperado. Con las tabletas pasó algo similar. Antes del iPad, las tabletas digitales no despertaban el entusiasmo de los consumidores, hasta el lanzamiento producido por Jobs.