No es lo mismo la Primavera en Mendoza. La llegada de la estación más agradable del año ha traído aparejada una abundancia de grandes noticias para el deporte de la provincia. La actividad viene teniendo un crecimiento constante e ininterrumpido que hacen que ya nos estemos mal acostumbrando.
Sin dudas que la noticia más importante de la semana será la reedición del superclásico mendocino. Gimnasia e Independiente vuelven a cruzarse y nadie está ajeno a lo ello significa. Recuperar ese clásico es una de las grandes deudas que tenía el deporte mendocino.
Es nuestro River-Boca, con la diferencia que es nuestro. No hace falta mirarlo por televisión, ni tener que seguirlo a la distancia. Está acá, a la vuelta de la esquina. Es el típico choque en el que no importan los antecedentes, en el que no interesa tampoco lo que pase después en el torneo porque ese partido es un torneo en si mismo, en el que cada uno de los hinchas tiene su historia y sus argumentos para sacar pecho frente al rival.
Soy un convencido que hay tanta verdades históricas, como hinchas. El fútbol tiene esa característica casi única en el que el perdedor siempre tiene argumentos para seguir sintiéndose superior al rival y viceversa.
Sino no se entiende cómo, más allá de la supremacía histórica que tienen los Azules, los mensanas se hayan organizado para llenar el estadio y no hayan hablado de otra cosa en la semana. La verdad que nunca importa quien llega mejor. Los románticos no pierden sus esperanzas.
Pero esta fiesta que se vivirá en el Parque no es la única a la que estaremos invitados los mendocinos. Es que desde el jueves, doce chicos mendocinos estarán cumpliendo el sueño de estar en un Juego Olímpico, un galardón que lo convierte en un personaje histórico. De hecho, apenas unas treintena de deportistas nacidos en nuestras tierras pudieron convertirse en "olímpicos" y son referentes eternos de cada una de las actividades.
Nicolás Diéguez (balonmano), Agustín Cabaña Santi y Gianella Belén Palet (hockey sobre césped), Juan Martín González Samsó y Julián Ignacio Hernández (rugby), Facundo Firmapaz (Tiro), Camila Samsó (Ciclismo), Tomás Herrera (remo), Iris Valeria González (breakdance), Victoria Gauna (basquetbol), Juan Bautista Amieva (Voleibol) y Rodrigo Tello (karate).
De ellos, el treinta por ciento son mujeres, otro dato que no es menor porque las damas vienen dando grandes logros a la provincia y de hecho de las cinco medallas olímpicas que hay en la provincia, tres son femeninas (Marina Di Giácomo, Macarena Rodríguez y Silvina D' Elía) y dos de varones (Pascual Pérez y Pablo Chacón).
También en esta semana las chicas pusieron a Mendoza en lo más alto del país al quedarse con el título Argentino de Selecciones en el certamen de futsal que se disputó en nuestra provincia. El logro es el tercero en forma consecutiva que consiguen.
Y aunque para muchos, es un dato que pasó desapercibido, haber tenido a tres mendocinas en la selección de basquetbol que viene de competir en el Mundial femenino no es un dato menor.
Cómo tampoco lo es haber contado con dos locales en el equipo nacional de vóleibol que estuvo en el torneo ecuménico y que Scaloni haya citado a Pity Martínez y Funes Mori para los amistosos del equipo nacional de fútbol frente a Brasil.
Cómo tampoco es menor que Godoy Cruz esté entre los ocho mejores equipos de Sudamérica y el tercero de Argentina, apenas atrás de Boca y River.
Estos hitos no eran comunes hace apenas una década, cuando mirábamos a Buenos Aires y Córdoba como las mecas inalcanzables.