Referentes del gobierno electo de la provincia de Tierra del Fuego adelantaron que continuará la obra de apertura de una ruta costera por el canal del Beagle iniciada por la gobernadora fueguina, Rosana Bertone, en medio de los cuestionamientos de organizaciones ambientalistas.
El coordinador de Gabinete y Control de Gestión del municipio de Río Grande, Agustín Tita, uno de los enlaces entre las autoridades del gobierno entrante y el saliente, declaró a medios locales que "la obra del corredor costero va a continuar, porque es importante para el desarrollo de la provincia". Si bien Tita planteó que la iniciativa presenta "situaciones irregulares que deben ser revisadas", entre las que mencionó el impacto ambiental, aseguró que "no hay que ponerse ni en un extremo ni en el otro", de las posturas. El llamado "Corredor del Beagle" es un camino de 132 kilómetros de extensión, dividido en varias etapas, que se propone unir la ciudad de Ushuaia con el sector sureste de la isla para abrir nuevos circuitos turísticos y productivos.
Los grupos ambientalistas objetan que la obra se lleva a cabo con deficiencias en los estudios de impacto ambiental y arqueológico. Además afirman que hubo al menos dos desmontes "ilegales", uno en la zona del Río Encajonado y el otro de más de dos kilómetros de extensión en un tramo cercano del camino en dirección a Punta Segunda. Los ambientalistas llevaron el caso a la justicia, que investiga un presunto daño ambiental y analiza en el fuero Civil un pedido de paralización de las obras. Bertone había confirmado que pese a los cuestionamientos la obra "va a seguir" durante su mandato que finaliza en diciembre, pero hasta el momento no se conocía la postura del gobernador electo y actual intendente de Río Grande, Gustavo Melella. "Tenemos que lograr el menor impacto posible en el ambiente pero también pensar en el desarrollo. Es una obra necesaria. Se puede discutir si es una prioridad aunque es incuestionable que generará un valor agregado para la actividad turística de Ushuaia", declaró Tita. El funcionario aseguró que la provincia tiene compromisos legales con la empresa adjudicataria de la obra, cuyo costo se estima en unos $1.700 millones y que si no se respetan los contratos se podría generar "un grave perjuicio económico al Estado".
La ruta costera sumó en los últimos días el respaldo de la Cámara de Turismo de Ushuaia, que la consideró clave para el desarrollo de la actividad "siempre y cuando se haga como corresponde", advirtió su titular, Marcelo Lietti. Desde la gestión de Bertone insisten en que los trabajos que se realizaron "cumplen con todos los requisitos legales", aunque admiten incumplimientos "administrativos" por parte de la empresa adjudicataria. "Las falencias han sido de orden técnico-administrativo y no de orden ambiental. La empresa omitió colocar cartelería de seguridad en una zona muy visitada por habitantes de la provincia y por turistas", aseguró el secretario de Medio Ambiente de la provincia. Télam
