Un desahogo. Un grito atragantado que retumbó en todo Villa Nueva.
El cabezazo de Marcos Báez en el descuento hizo explotar las gargantas de los comerciales. Con el último suspiro se pasó del inconformismo y los lamentos al éxtasis.
Y es que el conjunto de Darío Gianformaggio necesitaba romper con la sequía, tutearse con la victoria después de una arranque a los tumbos - sólo había sacado un punto de seis-.
Sufrió demasiado en el bautismo triunfal el dueño de casa, porque tuvo todo para marcar una amplia diferencia y no pudo concretar en la red lo que generó en el juego y a la hora de contabilizar las ocasiones de peligro. Aún saliendo con tres puntas desde el arranque (Vera, Altamirano, Báez), le costó el tiro del final.
Fue todo del CEC, manejando el desarrollo y llegando siempre claro al área de Cortez. Puso siempre a un hombre en el área para resolver, pero pecó de ineficaz y casi lo paga caro.
La fórmula estaba por los costados y a eso apostó el local. Frites hizo daño de la izquierda hacia al medio, mientras que Castellanos fue un puñal desbordando por el otro sector.
De una buena acción del 10 (Frites) llegó el gol de Altamirano.
Estaba todo a merced del CEC, dominando el terreno y abriendo grietas en un Atenas que llegó a nuestra provincia con la firme misión de llevarse un punto a San Juan.
Con muy poco los de Pocitos estuvieron a segundos de cumplir con el objetivo y amargar a su rival.
Castro hizo lo suyo en el área contraria marcando el empate con un remate abajo, y Cortez puso su parte tapándole un penal a Báez.
Parecía que la tarde venía esquiva. Todo lo que provocaba el equipo terminaba en lamentos por la situaciones desperdiciadas. Era chocar una y otra vez contra el paredón sanjuanino.
La incertidumbre se apoderó de Gianformaggio y compañía, pero los goleadores son optimistas por naturaleza. Saben que una les quedará. Y ahí fue Báez para colgar el balón en el ángulo. Golazo. Delirio.
Sí. Tiempo de revancha.
Luján y un empate que lo deja arriba
Era necesario para el Granate salir de su cancha y volverse con algo, por eso el empate ante San Martín de Rodeo vale y mucho, ya que se mantiene en la punta de la zona 10, junto a Independiente de Villa Obrera.
Lo positivo es que Luján se pudo levantar de un duro golpe, ya que el local se puso en ventaja en el primer minuto de juego gracias al gol de David Manrique.
Luego de asimilar el golpe el Granate sacó su amor propio y salió a buscar el empate. Antes del final del primer tiempo, San Martín se quedó con 10 gracias a la expulsión de Daniel Cejas.
En el segundo tiempo, Facundo Bailó logró un empate más que importante en un partido que se podría haber ganado.