Los equipos de rescate dieron hoy por concluidas las tareas en el edificio que se derrumbó en Taiwán como consecuencia del terremoto que sacudió la isla el sábado pasado con un recuento final de 116 muertos, mientras que hay una persona que sigue desaparecida pero que no esperan encontrar en la zona.
Los trabajos se dieron por finalizados tras recuperar el último cadáver, el de un portero del edificio, anunció en declaraciones a la prensa el alcalde de la ciudad de Tainán, Lai Ching-te.
Una última persona, que no residía en el edificio pero que se pensaba que podía haber estado dentro, fue dada oficialmente por desaparecida, indicó la agencia EFE. Además, 29 cadáveres no pudieron ser identificados todavía debido al fuerte deterioro que sufrieron a causa del derrumbe. El edificio Dragón Dorado tenía 17 plantas y albergaba unos 200 apartamentos y varios locales comerciales, y aunque era bastante moderno (fue construido en 1994) se derrumbó completamente durante el terremoto.
El responsable de la empresa constructora, Lin Ming-hui, y dos de sus colaboradores están detenidos bajo la acusación de homicidio por negligencia profesional, ya que hay amplios indicios de deficiencias en la construcción.
En total, 114 personas fallecieron en ese edificio, mientras que otras dos murieron en otro edificio de Tainán que sufrió un colapso parcial. El terremoto, de una magnitud de 6,4 grados en la escala de Richter, sacudió el sur de la isla durante la madrugada del sábado 6 de febrero y fue el peor que sufrió Taiwán desde el ocurrido el 21 de septiembre de 1999 que causó 2.415 muertos.