Un terremoto de 7,9 grados en la escala de Richter ha sacudido Papúa Nueva Guinea, en Oceanía, alrededor de las 7 (hora local) de la víspera.
Como consecuencia del seísmo, se activó una alerta de tsunami ante la posibilidad de que grandes olas llegaran al archipiélago. Horas después, las autoridades suspendían la alerta argumentando que la amenaza había pasado en gran medida, aunque pidió que se sigan vigilando las mareas costeras.
"Basándonos en todos los datos disponibles ... la amenaza del tsunami de este terremoto ya ha pasado", dijo el PTWC en una alerta actualizada y definitiva después del terremoto. Hasta el momento no se han reportado daños, ni personales ni materiales, resultantes del movimiento sísmico.
Datos geográficos
Papúa Nueva Guinea, oficialmente el Estado Independiente de Papúa Nueva Guinea es un país soberano de Oceanía que ocupa la mitad oriental de la isla de Nueva Guinea, la otra mitad es parte del estado de Nueva Guinea Occidental, y una numerosa cantidad de islas situadas alrededor de esta, cuya forma de gobierno es una monarquía parlamentaria.
Su territorio está organizado en veintidós provincias y su capital y ciudad más poblada es Puerto Moresby.
El territorio, situado al norte de Australia y al oeste de las islas Salomón, en el suroeste del océano Pacífico, corresponde a una región geográfica definida desde inicios del siglo XIX como Melanesia. Es, junto a Indonesia, el único país de Oceanía con frontera terrestre, ya que son países limítrofes
Las consecuencias del temblor también podrían afectar a otras zonas cercanas al epicentro, como Indonesia, las islas Salomón, Pohnpei, Chuuk, Nauru, Kosrae y Vanuatu. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, el terremoto se ha producido a 46 kilómetros al este de la ciudad de Taron y a una profundidad de 73 kilómetros. Los terremotos más profundos tienden a causar menos daños que los poco profundos.
Papúa Nueva Guinea asienta en el llamado Anillo de Fuego, un arco de fallas sísmicas que circunda el océano Pacífico que además de frecuentes terremotos suma también una gran actividad volcánica. De hecho, hace apenas diez días otro temblor de 7,7 grados afectó a la zona y disparó la alerta de tsunami, aunque por fortuna no hubo consecuencias.