El ministro de Relaciones Exteriores británico, Boris Johnson, dijo que su gobierno responderá "contundentemente" si se confirma que hay algún Estado tras el envenenamiento del exespía ruso Serguéi Skripal en una ciudad inglesa.
"Puedo asegurar a la Cámara que si surgen pruebas de la responsabilidad de un Estado, el gobierno de Su Majestad responderá apropiada y contundentemente", dijo Johnson en una comparecencia urgente en el Parlamento
"Aviso a los gobiernos de todo el mundo de que ningún intento de cobrarse una vida inocente en el Reino Unido quedará sin castigo ni sanción", sentenció Johnson.
La policía británica buscaba en Salisbury la sustancia usada para envenenar al exespía ruso Serguéi Skripal y a su hija Yulia, que seguían graves y cuyo caso recuerda al asesinato de Andrei Litvinenko.
El exespía fue hallado el domingo prácticamente inconsciente junto a su hija de 33 años en un banco próximo a un centro comercial de esta ciudad del sur de Inglaterra en la que vivía.
Ambos "no tenían heridas visibles y fueron trasladados al hospital del distrito de Salisbury. Están siendo tratados por exposición a una sustancia desconocida", dijo este martes la policía del condado de Wiltshire, precisando que uno de los miembros de los servicios de urgencias que les atendió está también hospitalizado en observación.
La policía tenía acordonados un restaurante italiano y un pub próximos al centro comercial.
Una testigo, Freya Church, explicó a la BBC que los dos parecían haber tomado "algo muy fuerte".
"Ella estaba apoyada en él. Parecía que se había desmayado. Él hacía unos movimientos extraños con la mano, mirando al cielo".
Putin mira a otro lado
El Kremlin dijo "no disponer de ninguna información" sobre este caso, según el portavoz Dimitri Peskov.
"Ustedes saben por qué estaba en Occidente, a raíz de qué acciones y decisiones; no voy a volver sobre ello. Y ahora observamos que se ha producido una situación trágica. Pero no disponemos de información sobre las razones", explicó Peskov.
Litvinenko, otro espía ruso que se convirtió en enemigo del Kremlin, murió en 2006 al cabo de una agonía atroz al ser envenenado por agentes rusos que colocaron polonio en su té en Londres, en lo que fue tildado de primer caso de terrorismo nuclear.
Su viuda, Marina Litvinenko, explicó a la prensa británica que tuvo una sensación familiar cuando vio las imágenes de los investigadores con sus trajes amarillos y escafandras buscando la sustancia que envenenó a Skripal, de 66 años.
El diputado Tom Tugendhat, presidente del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de los Comunes dijo que, "aunque es muy pronto", el asunto "tiene todos los distintivos de un atentado ruso".
El precedente Litvinenko
Mark Rowley, comandante de la policía antiterrorista británica, dijo a la radio BBC que "es claramente un caso muy inusual".
El comandante pidió cautela. "Creo que todos tenemos que recordar que los exiliados rusos no son inmortales, todos se mueren y puede existir la tendencia a las teorías de la conspiración".
"Pero al mismo tiempo hemos de ser conscientes de las amenazas de Estado, como se puso de manifiesto en el caso de Litvinenko", avisó.
"Todavía no se ha confirmado si fue asesinado, pero tras la patética respuesta británica al asesinato de Litvinenko con polonio en Londres, ¿por qué Putin no iba a volver a hacerlo?", se preguntó el ajedrecista ruso Garry Kasparov, fiero crítico del presidente ruso.
La respuesta de Londres se limitó entonces a imponer sanciones a los dos sospechosos del asesinato de Litvinenko, que nunca fueron juzgados y volvieron a Rusia, y no hubo represalias a niveles más altos, pese a que la investigación señaló a Putin.
De ex doble agente de élite y profesor a presunta víctima
Durante casi 10 años, Serguéi Skripal transmitió a los servicios británicos informaciones sobre el ejército ruso, hasta que fue desenmascarado y tras algunos años pudo llegar a Inglaterra gracias a un intercambio de espías.
Desarrolló una larga carrera en el GRU, los servicios de inteligencia del ejército ruso, hasta que ascendió a coronel. En 1999 pasó al ministerio ruso de Relaciones Exteriores, donde estuvo cuatro años hasta convertirse en profesor de la Academia militar-diplomática del Ministerio de Defensa.
Su posición privilegiada llamó la atención de los servicios de inteligencia británicos, que lo reclutaron en 1995, según sus declaraciones a la justicia rusa.
A partir de esta fecha, y hasta su detención en 2004, proporcionó la identidad de varias decenas de agentes secretos rusos que operaban en Europa, así como informaciones relativas a las unidades militares rusas y su estado de preparación para el combate.
A cambio, habría recibido 100.000 dólares a través de una cuenta bancaria en España.
Skripal se declaró culpable durante su juicio. Se le condenó en agosto de 2006 a 13 años de campo de alta seguridad y se le retiró el título de coronel.
La espectacular detención en Estados Unidos en 2010 de 10 agentes rusos "durmientes" volvió a poner a Serguéi Skripal en la palestra.
Esos 10 agentes fueron canjeados por Skripal y otros tres condenados en el intercambio más importante desde el fin de la Guerra Fría. Después se refugió en Inglaterra, donde vivía con discreción.
Casos célebres
En el aeropuerto
Kim Jong Nam fue agredido el 13 de febrero de 2017 con VX, un agente neurotóxico considerado como un arma de destrucción masiva.El medio hermano de Kim Jong-Un, que tenía que tomar un avión hacia Macao, en el sur de China, sucumbió al cabo de unos veinte minutos de agonía.
Té con polonio
En noviembre de 2006, el exespía ruso Alexandre Litvinenko, opositor al presidente Vladimir Putin, muere a los 43 años en un hospital londinense, víctima de un envenenamiento con polonio, sustancia radiactiva extremadamente tóxica.
Desfigurado con dioxina
En setiembre de 2004, el ucraniano Viktor Yúshchenko cae gravemente enfermo en plena campaña por la elección presidencial que lo opone al candidato favorito de Moscú, Viktor Yanukovich.
Lo envenenaron con dioxina.
Una inyección en el cuello
En setiembre de 1997, en Amán, agentes del Mosad, servicios de inteligencia israelíes, disfrazados de turistas canadienses intentan asesinar a Jaled Mechaal, dirigente del movimiento islámico Hamas, inyectándole veneno en el cuello.
Pinchado en el muslo
En setiembre de 1978, el escritor disidente búlgaro Georgi Markov es discretamente agredido, cuando esperaba un autobús en un puente de Londres, por un desconocido que, al pasar, le inyectó con un paraguas una cápsula envenenada.