La policía de Hong Kong advirtió ayer que manifestantes prodemocráticos planean acciones "un paso más cerca del terrorismo" para hoy en el territorio semiautónomo chino en coincidencia con los festejos por el 70° aniversario de la China comunista.
La violencia volvió a sacudir las calles de Hong Kong este fin de semana en lo que ya se ha vuelto rutina desde que en junio estalló un ola de protestas por una ya cajoneada ley de extradición pero que se terminó convirtiendo en un movimiento anti-China.
Los manifestantes, en su enorme mayoría jóvenes, acusan a China de estar erosionando la autonomía y las libertades que prometió a Hong Kong cuando la excolonia británica fue devuelta a Beijing, en 1997.
El comisario hongkonés Tse Chun-chung dijo ayer que información de inteligencia indicaba que manifestantes radicales estaban incitando a otros a cometer "actos extremistas", como matar a policías, disfrazarse de policías para matar a otros y prender fuego a estaciones de servicio durante las celebraciones. "Hay señales evidentes de que la violencia radical puede escalar. Estas acciones están un paso más cerca del terrorismo", afirmó el comisario.
La legisladora local Claudia Mo calificó de "chiste" la información de inteligencia policial citada por el comisario como justificación de su aviso y dijo que la advertencia era muy parecida a una hecha días antes por uno de los diarios oficialistas de China.
"Esto es propaganda china", afirmó. "Lo que es más preocupante es que la policía ha admitido que sus agentes se disfrazan de manifestantes. ¿Así que quiénes serán los incendiarios? ¿Quiénes serán los asesinos" La meta es infundir el miedo en la sociedad para que la gente tenga miedo de salir", dijo.
Compromiso chino
En Beijing, el presidente chino, Xi Jinping, renovó ayer su compromiso con permitir a Hong Kong manejar sus propios asuntos. En vísperas del Día Nacional, el mandatario dijo que China cumplirá con la fórmula de "un país, dos sistemas" para garantizar que Hong Kong "prospere y progrese" de la mano de la China continental.
En un lunes relativamente tranquilo, unos mil estudiantes formaron por la madrugada una cadena humana en el Puerto Victoria para mantener la presión mientas cientos más se congregaron cerca de una estación de subte en el distrito de Mong Kok, donde cantaron canciones de protesta.
La plataforma prodemocrática Frente Civil de Derechos Humanos (CHRF, por sus siglas en inglés), que ha organizado las mayores marchas en cuatro meses de protestas, solicitó permiso para realizar una manifestación, pero la policía y la Justicia lo rechazaron.