El caos del tránsito en pleno Centro mendocino dio lugar a un "relato salvaje" que permitió la detención de uno de los protagonistas del violento hecho. El acusado golpeó a un hombre que frenaba el avance de un colectivo y fue detenido porque tenía pedido de captura.
Habían pasado 30 minutos de las 12 de ayer. El flujo incesante de vehículos sobre calle San Juan se veía impedido en la esquina con Vicente Zapata por la presencia de un hombre que, parado frente a un micro del Grupo 100, le impedía avanzar. Con el correr de los minutos algunos se impacientaron y llamaron al 911. Entonces una patrulla fue desplazada al lugar y los efectivos constataron que un hombre de 34 años había impedido el paso del colectivo que cumplía el recorrido 110 de la STM, revelaron fuentes policiales.
Cuando los policías se acercaron a entrevistar al manifestante, notaron que estaba golpeado y entonces comenzaron a conocer parte de la violenta historia. De acuerdo al relato de la víctima, le había hecho señas al chofer en la parada para abordar la unidad. Pero el conductor había continuado su viaje.
El hombre aprovechó que la luz roja del semáforo detuvo el tránsito para caminar hacia la esquina y colocarse frente al transporte para impedirle avanzar y tratar de concretar su viaje. Pero uno de los pasajeros bajó ofuscado y golpeó en el rostro al manifestante, por lo que le causó un hematoma, describieron las fuentes consultadas.
Para mediar en la situación, los uniformados resolvieron trasladar a la comisaría Tercera a ambos hombres. En esa dependencia se identificó al golpeador como Mauro Riga (31).
Pero la sorpresa de los efectivos y auxiliares judiciales se dio cuando, al ingresar sus datos, constataron que sobre el hombre oriundo de Las Heras pesaba un pedido de captura desde el 15 de septiembre del año pasado solicitado por la Oficina Fiscal 5 de Las Heras.