El coronavirus entró al Palacio de Buckingham y temen por la salud de la Reina Isabel II

El coronavirus llegó a la residencia de la Familia Real por lo que la monarca se trasladó a Windsor para preservarse del contagio.

El coronavirus entró al Palacio de Buckingham y temen por la salud de la Reina Isabel II
El coronavirus entró al Palacio de Buckingham y temen por la salud de la Reina Isabel II

Nadie está exento de la pandemia mundial de coronavirus que continúa avanzando sin pausa, es por eso que tras confirmarse el primer caso positivo dentro del Palacio de Buckingham se tomaron medidas extremas para proteger a la reina de Gran Bretaña Isabel II.

Europa es ahora el nuevo epicentro de contagio del Covid-19. Con Italia, España y Alemania a la cabeza, pero con presencia en todo el continente, las cifras de enfermos y muertos no para de crecer, principalmente en mayores de 65 años, el grupo etario más afectado. 

El virus no tardó en llegar a la residencia de la Familia Real de Gran Bretaña. Un colaborador, del que todavía no se ha relevado el grado de cercanía con la monarca, dio positivo a las pruebas de la enfermedad, por lo que las alarmas por la salud de la mujer que pronto cumplirá 94 años y de su esposo Felipe, de 98 años, se encendieron y obligaron a actuar con rapidez.

Como primera medida preventiva, Isabel adelantó su tradicional viaje al castillo de Windsor, donde permanecerá aislada cumpliendo cuarentena, junto a su esposo, durante algunas semanas.

La más célebre figura de la monarquía moderna llegó a la residencia en auto, acompañada de sus mascotas Candy y Vulcan, dos perros corgis. En tanto que el duque de Edimburgo fue trasladado al lugar en helicóptero.

Las 500 personas que se desempeñan dentro de la casa londinense de la reina también fueron aisladas, a la espera de más pruebas de Covid-19.

El aislamiento de la soberana no ha sido impedimento para continúe al tanto de las novedades del mundo. Desde Windsor está en permanente contacto con el primer ministro británico, Boris Johnson, aunque sus reuniones habituales de los jueves fueron suspendidas por un tiempo.

Otra de las medidas preventivas que se tomaron desde el entorno real fue la cancelación de las tradiciones fiestas de jardín que ofrece en en su residencia de verano, para así evitar el contacto social.

Desde la Casa Real señalaron que la estadía de la monarca allí no tiene fecha estipulada, pero podría llegar a extenderse más allá de Semana Santa.

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