El Gobierno acusó a la policía porteña por la represión, mientras que desde la oposición lo culparon por la imprevisión y el uso político de la despedida al astro del fútbol argentino.
Cerca de las 14 las puertas de la casa de gobierno debieron cerrarse debido a la filtración de personas de forma violenta y al inicio de incidentes en en las inmediaciones de Plaza de Mayo.
También hubo detenidos. En la zona trabajaban la Policía de la Ciudad, la Federal, la Aeroportuaria y la Gendarmería.
Ocurrió en la vía que sale de Ciudad hacia el Este. Una camioneta terminó incrustada en un semáforo.
Marcharon para pedir la reapertura del espacio urbano y quisieron ingresar al lugar. Se enfrentaron con preventores.
